De puro ignorante que soy nomás…● Rubén Torres

Hace pocos días hemos asistido a una de las desgracias más importantes que ha vivido la provincia de Rio Negro: el fallecimiento del Vicegobernador, nuestro compañero peronista Carlos Peralta.
Nos ha sorprendido tristemente a todos nosotros que el Gobierno provincial haya decidido implementar cinco días de duelo, pero ninguno de asueto.

Compañeros, si revisamos la historia de los últimos años de Rio Negro, sabremos que Carlos Peralta no fue un legislador mas de la provincia. Por el contrario, él fue un hombre que trabajo incansablemente para que el Gringo Soria y Alberto Weretilnek sean Gobernador y Vice. En cada pueblo y en cada rincón, se sabe que él fue quien convoco a los representantes que compondrían la lista para que, finalmente, la provincia pueda ser administrada por el Frente Para La Victoria. Lo hizo buscando los consensos necesarios y articulando las acciones en cada lugar para evitar fragmentaciones en la contienda electoral.

No es nuestra intención mediante estas palabras enviar algún mensaje al Gobernador u oficinas del Estado competentes a tal fin, simplemente lo planteamos desde la ignorancia. No quisimos buscar normativas sobre lo que debería corresponder hacer frente a la muerte de un funcionario politico, porque esta pérdida ha movilizado nuestros sentimientos y excede cualquier cuestión racional o reglamentaria.

Consideramos que lo justo hubiera sido que la provincia tenga un día de asueto, que cada chico que no asistiera a la escuela pregunte por qué no hay clases y sus padres puedan responderle: “Estamos de luto porque ha fallecido Carlos Peralta, un hombre que ha dejado su vida trabajando en la política, construyendo una sociedad mejor y más justa, a través de la creación de leyes que en muchos casos ha acompañado el crecimiento de cada rionegrino.”

Que se entienda, planteamos esta situación desde un lugar de reflexión y la necesidad de transmitir el sentir de muchos compañeros peronistas y ciudadanos de esta provincia que conocieron a Carlos. Como así también, queremos manifestar nuestro repudio al accionar de un grupo de legisladores inescrupulosos, que se decían amigos de Peralta, que a metros de donde eran velados sus restos especulaban con adueñarse de espacios de poder dados ante la desaparición del querido compañero.

Es necesario como sociedad que acompañemos y respetemos el dolor de la familia del Vicegobernador en este difícil momento.

Compañeros, es importante que el pueblo de Rio Negro sepa entender que ha perdido a uno de sus máximos referentes de la política provincial. Un hombre trabajador, luchador, humilde y, por sobre todas las cosas, una buena persona.

Estamos convencidos de que la mejor manera de honrarlo será mediante el trabajo, tomando su militancia y trayectoria como servidor público de ejemplo para construir la provincia que él tanto anhelaba.

RUBÉN TORRES, LEGISLADOR DEL FPV