Análisis crítico a la expansión «por extensión» de la planta urbana de Villa Regina

(Daniel Flores*).- El equivocado modelo de solución propuesta “Por Extensión” que viene llevando adelante el intendente de Villa Regina, ing. Luis Albrieu, llevará al fracaso y derroche de los recursos económicos que se disponen y dispondrán, en el intento de urbanizar la meseta y aprovechar tierra propia “municipal”, para un objetivo equivocado: “área urbanizable para 10.000 viviendas y en lo inmediato dar solución habitacional a 1.900 viviendas.

La “solución” que se viene intentando presentar como “”la 2da. Colonización” es un error mayúsculo, un delirio, una equivocación que ningún político se puede permitir, porque le costará y se desperdiciarán muchos millones a la sociedad de Villa Regina.

Nadie con un poco de conocimiento de economía urbana, o con un poco de sentido común, se le ocurriría gastar 1.300.000 dólares (equivalente a costo de 100 has) y en el futuro millones de dólares (que nadie sabe por ahora cuantos, ni en que, ni para que …).

Tengamos en cuenta que la necesidad que tendrá Villa Regina hacia el año 2.055 (tasa crecimiento de 400/500 hab/año, son 100 lotes-5 has con espacios verdes y servicios públicos).

Con 320 has (95 para solucionar el déficit actual de 1900 viviendas + 225 has a futuro), se resolvería todo. No hay ninguna condición especial que haga presumir duplicar y triplicar la población cada 10 o 20 años como fue y es el caso Neuquén.

Esto se completa sólo con cubrir los vacíos (huecos) existentes en la trama urbana consolidada y el uso de sitios especiales de la “urbanización rural”.

Con lo que se gastó simplemente para subir a la barda (trabajo incompleto) hubiese alcanzado para que el municipio “compre” más de 100 has (13.000 dol/ha–2.000 lotes) o haber obtenido la tierra en convenios con propietarios y aplicado esos fondos a obras de completamiento de servicios de infraestructura.

Si se hubiese tomado la decisión mediante un análisis, donde se hubiese resuelto la ecuación económica, y no sobre la base de objetivos errados; la decisión de donde aplicar la “inversión publica” hubiese sido otro el resultado, porque la inversión pública es fuertemente generadora de inversiones y desarrollo privado.

El municipio tendría asegurado el recupero económico para promover nuevos desarrollos como “socio desarrollador” y en estos casos el municipio no necesita expropiar, porque con la inversión publica obtiene un porcentaje de la tierra en los desarrollos privados.

No hay peor decisión política/económica, para un Estado que querer aprovechar tierra barata, alejada de los centros urbanos, para instalar gente, por los costos en movimientos de suelos, obras viales, servicios de infraestructura, salud, educación, transporte, social, comercio, y para colmo se alejan a la gente de los lugares del trabajo, etc.

Cuando se hace el análisis sobre estas pautas, se ve el grave error que se comete al pensar esta tierra como “tierra urbana o a urbanizar” como vía de solución a los problemas habitaciones. Los únicos que hacen negocio son los propietarios de tierra lindera (barata) sin nada, a la cual le hacen calles, servicios, servicios. Para nadie más es negocio, para la sociedad de Villa Regina es un gasto (no inversión) y un aumento y derroche de impuestos para nada.

Propuesta– ompletamiento y consolidación del área urbana
Las tierras en la bardas, no deben estar atadas al desarrollo urbano, sino a otros intereses a impulsar y generar inversión privada, inicialmente para un proceso de forestación, producción de alimentos y en ese marco, con el tiempo, se irá consolidando un barrio en la periferia rural con todo el equipamiento y servicios que abastezca a esa área productiva/industrial, donde el gran desafío y voluntad desde el Estado es promover “motivar” a los productores a ir a “colonizar» la barda para el desarrollo productivo, industrial, duplicando o triplicando la superficie actual productiva. El empresariado privado de nuestra región ya comenzó hace mucho ese camino.

El municipio debe lograr un banco de tierras urbanizable, en el marco del master plan, en áreas cercanas o inmediatas a donde llegan o están los servicios y el equipamiento urbano (educación, salud, trabajo).

El nuevo gobierno municipal de Villa Regina podrá garantizar el crecimiento por lo menos al 2050, y dar solución al déficit actual con 300 a 320 has, las cuales están muy cerca y se ira completando el tejido urbano, significando un ahorro enorme en servicios de infraestructura, equipamiento urbano, salud, educación, etc.

Lo importante es tener claro y dejar explicitado el futuro de la ciudad al 2050, y de ésta manera se garantizará a inversores, empresas constructoras, estado municipal y provincial, el futuro.

Parte importante del dinero invertido por el Municipio de Vila Regina, debería ser aprovechado y utilizado por emprendedores, productores primarios, etc, que lleven adelante desarrollos en la meseta (4500 has), con producción de alimentos, forestación, industrialización, etc, que cerraría el circulo de interés público.

La nueva gestión municipal, tiene la responsabilidad de avanzar en el proceso de consolidación de las nuevas tierras (urbanas y productivas) dejando atrás “la errada aventura de la 2da colonización” y de esta manera recuperará y aumentará su inversión inicial, dado que será el “aportante de la tierra” y por lo tanto será parte de los beneficios, si se produce un programa a mediado y largo plazo de desarrollo.

*Arq. vicepresidente Fundesur
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