Estiman en casi un millón de pesos el valor del cargamento de drogas secuestrado, que finalmente fueron 100 kilos

(ADN).- La Policía de Río Negro valuó el cargamento de drogas secuestrado el último fin de semana en más de 800 mil pesos. En conferencia de prensa, explicaron el operativo que terminó con la detención de tres personas y los allanamientos en Viedma y Patagones. El pesaje final arrojó un total de 99,700 kilos de marihuana y 2,600 de cocaína. Se había realizado uno previo con distinto resultado.

El jefe de Policía, Fabián Gatti, calificó el operativo como «el más importante de la historia de Río Negro». El cargamento provenía de Mar del Plata con destino a Viedma, para ser redistribuído en la costa rionegrina. Acompañado por el Subjefe y el Director Seguridad, Gatti valoró el trabajo de la fuerza y agradeció la colaboración de la Policía de la provincia de Buenos Aires.

Luego de un proceso de investigación, se determinó que el sábado a la madrugada llegaría a la ciudad un cargamento de estupefacientes. La Policía detectó en el control zoofitosanitario de Villalonga dos autos que serían el transporte de las drogas. Dos móviles de la Policía de Río Negro interceptan uno de los vehículos y el segundo logra fugarse.

El relato oficial indica una persecución de 80 kilómetros hasta que el conductor pierde el control del auto a la altura de Stroeder y choca contra la banquina. Allí comienza una carrera a campo traviesa hasta lograr la detención. En el baúl se encuentran dos cajas y una valija con marihuana y cocaína.

El pesaje inicial a la vera de la ruta, dio como resultado 36 kilos de estupefacientes. Los jefes policiales explicaron que se midió en onzas, lo que justificaría la llamativa diferencia con la medición final en el juzgado federal.

«Hemos desbaratado una de las bandas que introducían drogas en esta zona», anunció Gatti, y aseguró que se realizaron diferentes allanamientos en domicilios de Viedma donde se secuestraron computadoras y teléfonos móviles que están en manos de la justicia federal merituando pruebas, ya que surge de las escuchas telefónicos de la investigación, algún tipo de participación de las personas involucradas en lo que se conoce como la «conexión local».