Cambio radical: «Pertenecemos a Cambiemos desde sus orígenes»

(ADN).- “Nosotros pertenecemos a Cambiemos desde sus orígenes. Como convencional nacional participé de la votación que decidió la alianza del radicalismo con el PRO”, señaló a ADN, Juan Carlos Vallés, quién junto a otros 25 convencionales se retiraron de la reunión del máximo órgano partidario de la UCR –en Villa Regina- al denunciar irregularidades, atropellos y malos tratos.

Vallés también destacó que Cambio Radical fue a la Convención con voluntad de participación, incluso dio quórum con sus 25 convencionales, a una reunión que contaba con 103 convencionales, pero que transcurrido el debate decidieron no avalar la incorporación incorrecta de convencionales, el mal trato a que fue sometida Cynthia Hernández, de General Roca y otros atropellos y agresiones.

De esta manera se retiraron de la reunión Noemí Sosa, que ocupa una secretaria en la Convención; el intendente de Huergo, Miguel Martínez; Cynthia Hernández, de General Roca; Juan Carlos Vallés, de Viedma, Verónica Tofoni, de Villa Regina; Guillermina Alaniz, de Bariloche, entre otros dirigentes que integran Cambio Radical, un espacio interno que se nutre de las diferentes vertientes histórica del radicalismo provincial.

Imposible ocultar que la base de este debate es la alianza con el PRO, pero más aún, una pelea por espacios de poder dentro de la alianza gobernante nacional y su incorporación a la estructura burocrática.

La conducción radical viene denunciado sistemáticamente desde hace meses, el destrato a que son sometidos los dirigentes partidarios por parte de los referentes provinciales macristas, aun desconociendo que el propio Sergio Wisky, viene de esa cuna, pero tampoco es menos cierto que el PRO pregona “la nueva política” y el alejamiento a toda estructura de “los viejos métodos” y dirigentes agotados y cuestionados en la sociedad.

Este es el argumento más escuchado en la intimidad de los ámbitos macristas, cuando se buscan referencias en la dirigencia de la UCR de Río Negro. Tampoco es neutro el comentario que dejan trascender en el radicalismo, al comparar a Mauricio Macri con Fernando De la Rúa y la experiencia de la Alianza. Todo suma para que se estiren las distancias.

Precisamente conductas y procedimientos internos partidarios como los que denunció Cambio Radical, el domingo en Regina, no hacen más que reafirmar que “algunos radicales no son bien vistos” en Cambiemos, a contrapelo de la conducción de la UCR que vislumbró con la llegada de Mauricio Macri que volvía a ocupar cargos públicos e incluso hizo trascender una nómina propuesta para cargos nacionales, que no prosperó.

El centenario partido que gobernó Río Negro por 24 años sucumbió ante la necesidad de seguir en el poder que tantas veces detentó, aun a costa de aparecer como “pedigüeño”.

Sin embargo hay sectores radicales que se sumaron a Cambiemos desde la sumatoria, por convencimiento, con una ambición más recatada y que ahora observan a la conducción de su partido en una actitud más cercana al despecho, donde no duda en amenazar al PRO de no tener limitaciones políticas-ideológicas, de asociarse al massismo o a Juntos Somos Río Negro, o cualquier otra alternativa, si no son tenidos en cuenta.

Cambio Radical también decidió alejarse de esta caracterización de la dirigencia de la UCR, al abandonar la Convención de Villa Regina, para evitar que se “haga tabla rasa con todos, porque no todos somos iguales”, señaló una dirigente del radicalismo rionegrino.

Se puede decir entonces que hay radicales con Cambiemos, como propuesta partidaria nacional y orgánica, radicales que no dejan de ilusionarse en una confluencia con el gobernador Alberto Weretilneck y radicales que no descartan una alianza con el massismo, del mismo modo que hay justicialistas rionegrinos trabajan con el PRO.

Pareciera que hoy es difícil evitar la diáspora en el radicalismo, animada por problemas personales y dirigenciales que son escollos para la unidad, pero estos males no comenzaron con la llegada del PRO, habría que buscar en la propia historia de la UCR de Río Negro.