Visa podría ser multada con 150 millones de pesos por posición dominante

Después de 20 años la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), advierte por las conductas anticompetitivas de las tarjetas de crédito y según se informó la empresa Prisma, propietaria de VISA Argentina, podría recibir una multa de 150 millones de pesos, por abuso de posición dominante y posible cartelización de los 14 bancos accionistas.

Sobre el tema la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) señaló que «si bien las pequeñas y medianas empresas celebramos que ese organismo actúe frente a situaciones injustas de mercado, no hay que olvidar que anteriormente fue el Congreso Nacional quien salió en defensa de las pymes al sancionar, primero en 1998 la Ley de tarjetas 25.065 que bajó las comisiones que cobran las tarjetas de crédito a los comercios pymes del 10% al 5%2».

«Luego en 2004, la Ley 26.065 que bajó del 5% al 3% la comisión máxima para tarjetas de crédito y a 1,5% para débito. Y nuevamente hoy, frente a la situación de riesgo de las pymes y el impacto que estos costos financieros desmedidos causan, el Senado está considerando sancionar una nueva ley donde se reduce a 1,5% las comisiones por tarjetas de crédito y se establece la gratuidad de las ventas con débito», informó CAME.

También dice CAME que en Defensa de la Competencia advierten que a partir de pronunciamientos como el que realizaron, comenzará a regir la libertad de competencia en el mercado argentino y bajarán las comisiones; como si no fuese necesario sacar leyes para que estas situaciones no sucedan.

Pero eso no es así. Está comprobado, en la Argentina y en el mundo, solamente con leyes se interviene para regular y evitar los abusos donde hay grupos monopólicos u oligopólicos. No con exhortaciones.

El pronunciamiento de la CNDC es positivo y ayuda. Pero si el organismo y las autoridades nacionales realmente quieren evitar los abusos del sector financiero sobre las pymes, deben simultáneamente respaldar la petición de realizar una nueva Ley como la que promueve CAME, que en los últimos 20 años ha sido la única forma de contener los atropellos en el mercado.

También sería bueno examinar qué ocurre con el abuso de precios en otros rubros importantes de la economía argentina que hacen al consumo popular.