Sobre la represión en corte de ruta
Las causas que favorecen la pobreza: La ineptitud de la clase gobernante para tomar decisiones serias sobre planificación urbana, contención social y un proyecto que incluya a todos.
En Bariloche se evidencia una brecha social que se ahonda año tras año. Solo unos pocos se llevan la gran porción de la torta y del otro lado, a unos pasos, una gran cantidad de gente que vive en condiciones de supervivencia.
Desde hace años que se escucha hablar de proyectos políticos que se diluyen tras las elecciones. Hablan de inclusión, pero las políticas ineficaces y la corrupción imperante solo le deja la puerta abierta a esos pocos, los mismos de siempre, que hacen sus grandes negociados.
Las posibilidades no son las mismas para todos. Esa desigualdad, evidente y marcada, genera hambre, genera pobreza, genera rebeldía. Las protestas se suman, las represiones e intimidaciones también.
Bariloche tuvo un 2012 hervido de protestas. La clase gobernante, tanto a nivel local, como provincial, no tuvo reacción ni oídos para estas protestas. La gimnasia política de obsecuencia y corrupción es un número que se multiplica a niveles preocupantes.
Las disputas por puestos políticos ocupan la mayor parte del tiempo de estos funcionarios. Ahora bien, si esas disputas dieran frutos positivos hacia lo social, esas disputas tendrían un sentido político amplio. Pero no es así, estas luchas son míseras luchas que mas tarde no se expresan en acciones públicas de salud, educación y trabajo. No, solo es política en sentido estrecho, tan estrecho como la ciega obediencia al pulgar de quien esta mas arriba en esa carrera política.
Mientras se repitan las causas de la miseria, se repetirán las causas de los descontentos. Y la respuesta del llamado gobierno, a esta situación social grave e insostenible es la represión.
No se puede entender de otra manera la acción de gendarmería, enviada por el juez Moldes, a terminar con un corte de ruta.
Ni en la época menemista hubo tal persecución a luchadores sociales. En 1997, el mismo juez Moldes procesó a 13 docentes y padres por manifestar en la ruta 237 en favor de la escuela pública, pero los procesados permanecieron libres mientras se definía su situación. En cambio el lunes pasado, ante una protesta solidaria hacia los 5 detenidos en Viedma y Fiske Menuco, que cortaban la ruta 40 en forma intermitente cada 20 minutos, y poco antes de que finalizara la misma, el juez Moldes ordena detener y deja en situación de incomunicación a 6 personas, entre ellas un joven de Bahía Blanca que se solidarizó con los manifestantes. El accionar de gendarmería: maltrato en el momento de la detención, cometiendo vejaciones públicas con niños que se encontraban con sus familias en el lugar. Separados después y
dejando en situación de absoluta indefensión y desprotección a los hijos de los detenidos y habiendo trasladado a cientos de kilómetros de distancia a los detenidos responsables según el gobierno de lo que se ha dado en llamar el saqueo del 20 y 21 de diciembre.
Sobre las condiciones en que se encuentran detenidas las tres mujeres, denunciamos el estado en las que el llamado gobierno las mantiene: Detenidas sin procesamiento. Con secreto de sumario lo que entorpece la defensa, siendo que esto llamado delito, es excarcelable.
Si bien se levantó la incomunicación, las mujeres permanecen en celdas de uno por tres metros, e imposibilitadas para hablar entre ellas. La comunicación con la abogada se realiza a través de las rejas y en presencia de personal de policia federal.
Ha sido negado el ingreso al Colectivo de DDHH de El Bolsón.
Las mujeres pudieron tener acceso a un blok y fibrón para escribir, luego de tres dias durante los cuales, familiares y abogada insistentemente debieron solicitar estos elementos.
La represión, intimidación y el amedrentamiento como modalidad ya han causado muertes, heridos y presos. Y de profundizarse solo generarían más victimas.
A los gobernantes les decimos:
Ustedes ahondan las causas cuyas consecuencias las sufren las clases bajas.
Va siendo hora que quienes gobiernan se hagan cargo de esta situación desde un lugar digno e inclusivo.
Va siendo hora que entiendan que la política desde sus bocas es una palabra desprestigiada, sucia, mentirosa.
Va siendo hora que empiecen a gobernar para todos, que escuchen y entiendan las condiciones de los reclamos.
No a la criminalización de la protesta.
No mas ley antiterrorista.
No mas represiones.
No mas presos politicos. Libertad a los detenidos.
Basta de chivos expiatorios.
Es lamentable tener que recordarles que eso que todos llamamos democracia ustedes lo deforman y ensucian con la delgadez de sus conciencias sociales.
FUENTE: Vecinos Antoconvocados de Bariloche