Para Piccinini la defensora se escuda en mentiras y frenó causas contra la corrupción
Viedma (ADN).– La legisladora Ana Piccinini respondió las críticas que realizó la defensora del Pueblo, Nadina Díaz, en su informe donde dice que encontró “un gran desorden respecto al registro de las causas”. La parlamentaria dijo que la titular del órgano de control se escuda en mentiras y que existe un abandono total y absoluto de la causas contra la corrupción que ella inició.
Piccinini dijo también que la defensora (Díaz) alega lo del supuesto desorden con una serie de argumentación falsa, ya que todo se puede comprobar ingresando a la página de la Defensoría donde por medio de un link se puede encontrar un listado con cada uno de las causas y con todo los datos detallados de cada expediente. También había un listado en soporte de papel, además de los expedientes originales”.
Recordó que el organismo de control tenía “un protagonismo extraordinario con respecto a la corrupción y ahora quedó total y absolutamente paralizado. No fue atendido ni procurado por la defensora del Pueblo”.
“Es decir que abandonó no sólo lo relacionado con lo que el órgano de control detectó que estaba vinculados a la corrupción, sino que abandonó, por ejemplo, el trámite del 82 por ciento móvil que nosotros habíamos hecho en la provincia y que luego lo presentamos en la Justicia Federal , donde demandamos al ANSES por el 82 por ciento móvil. Esta denuncia nos llevó un estudio de un año con el abogado Manuel Castañera, que todavía trabaja para la defensora”.
Reflexionó que “me parece muy mal, muy feo escudar nuestras falencias, escudar nuestra falta de valentía para hacer que el organismo funcione como debe ser”.
“Escudándose en mentiras y alegando desorden cuando en realidad el desorden no existió nunca porque sino no hubiéramos llegado a los estándares de trabajo que llegamos”, comentó.
“Es una injusticia lo que hace esta funcionaria”, dijo.
En otro momento del la entrevista con ADN comentó que los pedidos de informes que ha realizado la funcionaria tienen que ver con una implosión del propio poder hacia los propios ministros. “Ella está colaborando, porque en Labor Parlamentaria se delineó una puesta de seguridad muy importante para el discurso de la defensora, donde nos obligaron a entregar por anticipado las preguntas, cuando ese mecánica nosotros ya la habíamos abandonado totalmente”.
“Con esto de adelantar las preguntas por escrito fue poner una mordaza a los legisladores y quitarle espontaneidad a la reunión”, interpretó Piccinini.
“Me llama la atención que la defensora, por un lado, aparentemente tomando una actitud activa envía pedidos de informes a las cabezas de los ministerios directamente y por el otro lado se la protege para que los legisladores no le pregunten espontáneamente”.