Acuerdo UNC SPU no es nocivo, sino superador ● Miguel Angel Silva
Quienes conocen la historia de los últimos años de la Universidad del Comahue saben que la crisis vivida entre 2006 y 2008, además de otros impactos negativos, produjo un déficit presupuestario que llevó a declarar al Consejo Superior la Emergencia Presupuestaria y Financiera, alimentado además por el pago de zona desfavorable sobre adicionales particulares desde el 2001 y las deudas arrastradas con AFIP desde la década de los 90′.
Aún con esta desfavorable situación de arrastre, la Universidad Nacional del Comahue pudo en estos últimos años transformar cinco unidades académicas en facultades, crear 13 carreras de grado y 31 de posgrado, incrementar en 859 cargos docentes entre 2005 y 2012, recuperar una preinscripción que supera los 10.000 alumnos por año y otorgar más de 1200 títulos anuales entre otros logros.
Hoy la práctica de la crítica distorsiona políticamente el acuerdo entre la Universidad y la Secretaría de Políticas Universitarias de la Nación, sin querer entender que la gestión de este acuerdo es la que ha permitido paliar el déficit con un aumento del presupuesto genuino de casi 33 millones de pesos en 4 años y 25 millones por única vez.
En ese marco, no es cierto que el acuerdo con la SPU, ratificado por amplia mayoría del Consejo Superior, implique ajuste o precarización laboral ya que siguen vigentes las ordenanzas que hacen a nuestro régimen laboral. Tampoco es cierto que se vacíen las cátedras o se impida cubrir las vacantes producidas por las jubilaciones. Y menos cierto aún que se oculte información sobre el déficit actual ya que la misma está explícita y disponible en los informes escritos de cierre de los ejercicios anuales, en especial, del cierre de los ejercicios 2011 y 2012.
Por ello, desconociendo las intenciones descalificadoras de quienes pretenden distorsionar los hechos y convertirlos de avance en retroceso, invitamos a la comunidad universitaria a que solicite la documentación que se despliega en torno de este acuerdo y realice su propia lectura crítica.
Ing Miguel Angel Silva
Vicerrector UNC