Más panaderos del Alto Valle reducen la cantidad de sal en sus productos

Cipolletti.- El Ministerio de Salud sumó 17 panaderías de General Roca y Cipolletti a la iniciativa “Menos Sal Más Vida”, para empezar a reducir paulatinamente la cantidad de sodio que utilizan en sus productos. El compromiso fue asumido en las jornadas de Promoción de la Salud desarrolladas en ambas ciudades del Alto Valle.

La iniciativa tiene por objetivo disminuir el consumo de sal de la población en su conjunto, para reducir la importante carga sanitaria que representan las enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares y renales. Constituye una de las principales acciones de promoción de la salud y forma parte de un plan integral de prevención y control de enfermedades crónicas no transmisibles en todo el país.

El Jefe del Departamento de Enfermedades Crónicas No Transmisibles del Ministerio de Salud, Carlos Tassara, explicó que “la participación de los panaderos, como actores involucrados, es fundamental, ya que producen un alimento muy consumido.”

Cabe señalar que las Jornadas de Promoción de la Salud concretadas en General Roca y Cipolletti abordaron la importancia de la reducción de sodio en los grupos de alimentos prioritarios, para de esta manera incidir sobre uno de los factores de riesgo de la enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión. “Esta patología afecta a un tercio de los rionegrinos”, apuntó Tassara.

Se estima que el consumo diario de sal por argentino se ubica entre los 12 y 13 gramos. Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS), como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), recomiendan un consumo no mayor a los 5 gramos.

Promoción

Asisitieron a las Jornadas de Promoción de la Salud realizadas en General Roca panaderos locales y representantes de cadenas de supermercados productoras de su propio panificado. Allí, Salud logró el compromiso de 6 panaderías para sumarse a la iniciativa.

“Se trabajaron las características de la propuesta, que implica una reducción progresiva en el agregado de sal al momento de la preparación de la masa, los cambios en tiempo de leudado; de cocción y los resultados finales. Esta reducción en la receta no es notado al momento de ser consumido el pan”, sostuvo Tassara.

Posteriormente, la actividad se trasladó a Cipolletti, donde otras 11 panaderías asumieron el compromiso de comenzar a reducir la cantidad de sodio utilizadas en la elaboración de sus productos.

En las dos ciudades, las Jornadas contaron con la colaboración de sus respectivos gobiernos municipales y fueron organizadas conjuntamente entre el Departamento de Enfermedades Crónicas No Transmisibles y las unidades regionales de Salud Ambiental del Alto Valle Este y Oeste.

“Desde el Ministerio de Salud se continuará trabajando y profundizando las acciones que se vienen desarrollando para aumentar la participación de este sector, en pos de la salud de la comunidad”, informó finalmente Tassara.