Exportación de frutas rionegrinas: sobre llovido mojado
Viedma.- El presidente del Bloque de la Alianza Concertación para el Desarrollo Bautista Mendioroz manifestó su profunda preocupación por la situación planteada a las exportaciones frutícolas provinciales por la entrada en vigencia de la Disposición del gobierno nacional que prohíbe el trasbordo de fruta en el puerto de Montevideo.
La Disposición de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables Nº 1108/13 sancionada el 25 de octubre pasado, por este organismo nacional dependiente del Ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo, establece que “Dentro del ámbito geográfico de los países que integran el Mercosur las cargas de exportación originadas en puertos argentinos, únicamente podrán ser transbordadas en otros puertos de jurisdicción nacional o en puertos de los Estados parte del Mercosur y sus Estados asociados que mantengan vigentes acuerdos de transporte marítimo de cargas con la República Argentina”. Esto significa que toda carga de exportación originada en Argentina podrá ser trasbordada en puertos Argentinos o en Brasil (único país que tiene firmado con Argentina un Acuerdo Bilateral sobre Transporte Marítimo) excluyendo explícitamente al puerto de Montevideo desde donde hace más de una década realizan esta operatoria los buques con fruta que salen del Puerto de San Antonio Este con destino de ultramar, afirmó Mendioroz.
La medida en cuestión reviste una gravedad inusitada para el negocio frutícola regional porque transforma una operatoria aceitada y competitiva en engorrosa, incierta y con un aumento de costos considerable al hacer trasbordar de un día para otro la fruta rionegrina desde el puerto de Río Grande en Brasil. “La pérdida de mercados está a la vuelta de la esquina porque lo único que logran es encarecer las exportaciones regionales, sobre llovido mojado ”, enfatizó Mendioroz.
Tanto el Gobernador Weretilneck como el Senador Pichetto deben sincerar el tema dado que conocen perfectamente que toda esta situación no es “una decisión estratégica en el marco del Mercosur” como pretende venderla el relato oficialista. Comprende lisa y llanamente un represalia contra el gobierno uruguayo que en realidad se va a transformar en un boomerang de características negativas extraordinarias para nuestra actividad frutícola.
Lo que deben hacer las autoridades provinciales es no dilatar la cuestión y solicitar al Ministro Randazzo la inmediata suspensión de la medida tal como pidiera en noviembre pasado la propia Cámara de Exportadores de la República Argentina y donde ya dejaban constancia de los daños y pérdidas que se ocasionarían a nuestras economías regionales, concluyó el Presidente del Bloque ACD