Nada se disimula ● ADN
Las palabras pierden valor frente a los hechos. Nada se disimula y tampoco son creíbles declaraciones de convivencia armónica.
El gobierno presenta una grieta importante, difícil de salvar, primero porque sus principales protagonistas desean lo mismo: la gobernación en el 2015 y segundo porque la dirigencia de uno y otro sector hace todo lo posible para marcar las diferencias y agitar las peleas palaciegas.
Alberto Weretilneck nunca superó el complejo de “ocupa” y el justicialismo tampoco aceptó que tras una espera de 28 años y luego del triunfo electoral, un gobernador no peronista terminara sentado en el despacho de Belgrano y Laprida, de Viedma.
El cipoleño llegó de la mano de Carlos Soria y la tragedia tuvo un largo duelo, donde el gobernador no supo, no pudo o no quiso liderar el nuevo proceso que se instalaba en la provincia y el peronismo no perdona el desprecio por la oportunidad y el lábil manejo del poder.
El presidente del PJ rionegrino, Miguel Pichetto, también sintió esa sensibilidad en la piel justicialista y escuchó los reclamos de los principales dirigentes provinciales, que piden lo que les corresponde por esfuerzo propio.
Ahora se acabaron los eufemismos y aprovechó el cuarenta aniversario de la muerte de Perón para enviar un claro mensaje a los peronistas rionegrinos.Les dijo que»la sociedad está esperando que el cambio llegue» a Río Negro y que «es hora de que nos animemos a pensar un provincia diferente» y pidió «volver a ser la fuerza política mayoritaria que conduzca los destinos».
Lo reiteramos una vez más, el tema petrolero fue el punto de inflexión, o quizás la última excusa para definir posicionamientos políticos en el Frente para la Victoria.
Hoy se cuentan los números en la legislatura y ante la posibilidad de no tener mayoría, el oficialismo aceptó revisar los temas críticos de la oposición interna y externa, entre otros la deuda impositiva, el tema ambiental, las inversiones, el planteo jurídico en la Suprema Corte de la Nación y cómo se cumplirá con la inversión de 18 millones de dólares en obras, ambulancias, cámaras de seguridad, equipamientos para bomberos y otros.Hay desconfianza sobre cómo la empresa asumirá esta cláusula.
A Weretilneck le interesa el tema de la compra de cámaras de seguridad que se colocarían en ciudades rionegrinas y tiene en este proyecto la experiencia de Sergio Massa en El Tigre, un espejo donde mirarse.
El oficialismo reitera que tiene una “nueva mayoría” parlamentaria, a pesar que los números dicen lo contrario y si las modificaciones no llegan la ley se votará igual. Ahora el Ejecutivo tiene las propuestas de los legisladores para producir cambios al acuerdo, a pesar de los dichos de que el texto original no se toca.
Siempre hay manera de alcanzar el número necesario, a pesar de la oposición legislativa hoy expresada al menos por los votos de la bancada Eva Perón; el bloque Néstor Kirchner; Ana Piccinini y los radicales y la mitad más uno de los presentes también se alcanza con ausencias en la Cámara, como sucedió cuando se votó el presupuesto 2014, sólo hay que recurrir a la persuasión.
Los principales operadores del gobierno hablan de una nueva mayoría –al amparo del petróleo- contando a su favor a los radicales W. Incluso no pasó inadvertida la presión hacia los legisladores del bloque de los intendentes radicales cercanos al gobierno. Bautista Mendioroz pide un rechazo monolítico al acuerdo.
Mientras siguen las dudas y las incógnitas, un legislador justicialista se preguntaba cómo hace el gobierno para pagar el sueldo y el aguinaldo juntos, cuando estaba preocupado por el déficit, la recaudación no aumentó, no hubo aportes extras del gobierno nacional y el tesorero dice que este año no sea pedido crídito. Cosas de brujo.
El tema parlamentario para el Frente para la Victoria es sólo la punta del iceberg del mayor volumen de problemas. El justicialismo se reorganiza y toma distancia, incluso se habla de algunas renuncias en el gabinete, a la vez que se menciona a Julio Arriaga como futuro colaborador de Weretilneck.
El peronismo cierra filas, lo mismo que en el orden nacional, y una muestra ha sido la reunión en Buenos Aires de Martín Soria, su hermana María Emilia, la senadora Silvina García Larraburu y María Martini con el senador Pichetto.
Si bien este encuentro fue publicitado, reuniones anteriores fueron reservadas, donde los intendentes de Bariloche y General Roca acudieron al despacho del senador en el Congreso de la Nación. Las deliberaciones siempre fueron en torno al gobierno provincial y el proceder del gobernador.
María Martini mantiene una estrecha relación con Miguel Pichetto y trabaja en sintonía con Martín Soria, incluso en el justicialismo se la menciona con posibilidades de acompañar al senador en una eventual fórmula a la gobernación.
Alberto Weretilneck tampoco se queda de brazos cruzados y trascendió que podría enviar a la Legislatura el nombre del vicegobernador para cumplir con el artículo 180 de la Constitución de Río Negro, una triste evidencia de la falta de respeto por las instituciones cuando por un acuerdo interno sepermitió cubrir sólo la vacante del titular de la Legislatura, por fuera del precepto constitucional.
En el mismo sentido encomendó a un legislador para que opere en la Justicia la habilitación de Miguel Vidal, justicialista de Cinco Saltos, para que asuma como legislador y ocupar la vacante que se genera con el nombramiento de un nuevo vicegobernador. Casualmente el viernes se realizó el sorteo para ver el orden en que los jueces deben opinar.
El gobernador sabe de la tensión en las relaciones con el PJ y sus principales dirigentes. Incluso que también existen escasos –por no decir nulos- canales de diálogo con el gobierno nacional. Siempre que llegó al núcleo de la Presidente fue de la mano de Pichetto o por mediación de Martín Doñate con el “Cuervo” Andrés Larroque, jefe de La Cámpora nacional.
Hoy a Weretilneck lo miran con recelo en la Casa Rosada y en ámbitos peronistas se estima que el gobierno nacional tiene más información de las relaciones del gobernador con Sergio Massa, que las que circulan en la provincia, como fue la reunión con el candidato del Frente Renovador en la casa del empresario petrolero Carlos Bulgheroni, dueño de Bridas y Pan American Energy.
Cabe recordar que la página digital Impacto Neuquén, publicó el 28 agosto del año pasado que “Petrobras planea vender más activos… como parte de un plan de desinversiones por u$s 9.900 millones”. La información la brindó el director financiero de la petrolera estatal brasileña, Almir Barbassa.
Se citan datos recogidos por la agencia internacional Reuters, y menciona que “la estatal brasileña negocia la venta del área Río Neuquén al empresario argentino Carlos Bulgheroni, de Pan American Energy”.
También se especula con una visita del bahiense Dámaso Larraburu, referente de Sergio Massa en la sexta sección electoral. Larraburu llevó al massismo al intendente bahiense Gustavo Bevilacqua, primo del ex gobernador Soria.
Ya es un secreto a voces que Alberto Weretilneck piensa en un armado independiente en Río Negro, donde estarán además del Frente Grande, sectores del peronismo que hoy lo acompañan en el gobierno, algunos intendentes y los llamados radicales W, que mantienen estrecha relación con el gobernador y sus principales operadores políticos.
Para luego del receso legislativo se espera otra controversia. Ingresó al parlamento el proyecto de las elecciones primarias, abiertas y simultáneas que envió el Ejecutivo y dista mucho de los compromisos asumidos por el gobernador con propios y extraños. Habrá debate en la elección de la fórmula a la gobernación, el sistema de representación de los legisladores y la posible simultaneidad con las PASO nacionales. Nuevamente a contar los votos.