Agrupación Cordillera visitó Escuela Rural N º 322
Bariloche.- La Agrupación Cordillera y el equipo de trabajo de la Senadora Silvina García Larraburu, visitó la Escuela Rural de jornada extendida N° 322, para agasajar a los chicos y chicas del establecimiento, quienes esperaban ansiosos para festejar el día del niño.
Temprano un par de vehículos se pusieron en marcha cargados de ilusiones, el destino era una escuelita rural casi escondida donde el paisaje regala, a la vista atenta, la posibilidad de observar animales autóctonos como los guanacos, choiques y zorros. Luego de varias contingencias que el clima lluvioso y las características del suelo pusieron, se hizo visible el establecimiento escolar, con lo cual la primera parte de la tarea ya estaba realizada.
Allí en esta zona un grupo de alumnos esperaban para festejar el día del niño, si bien algunos pueden pensar que esta fiesta ya pasó, no es la misma visión del maestro rural Jorge Quezada “Que bueno que pudieron llegar, están todos muy entusiasmados, ya que hemos tenido mucha lluvia en la región y esto impidió que se les pudiera festejar su día. Son catorce chicos, que hoy llegaron acompañados por sus familiares para estar todos juntos. Sabíamos que Silvina no nos iba a fallar, y esto que trajeron es muy lindo ya que contar con un inflable y una cama elástica es una novedad que verán y disfrutarán por primera vez en sus vidas”.
Los padres, abuelos, hermanos y demás familiares de los alumnos también participaron activamente de una jornada en la que los niños recibieron juguetes, artículos deportivos, golosinas, una riquísima torta acompañada con chocolate caliente y por supuesto las infaltables tortas fritas. La payasa “Alex” pintó hermosas mariposas en las caritas de las nenas y puso toda su buena onda para organizar una gran variedad de juegos.
Se realizó también un acto en el patio de la escuela, ya que la senadora hizo llegar una Bandera de izar, constituciones nacionales para cada uno de los presentes y los materiales necesarios para terminar el futuro invernadero.
De apoco la jornada se iba terminando, hasta el momento de la despedida, muchos saludos, abrazos, apretones de mano y la promesa de volver en algún otro momento. De testigo quedó la Bandera argentina en el mástil del patio, contemplando y resguardando toda esa inmensa estepa rionegrina.