Defensoría busca se ordene a Salud Pública que garantice salud de una nena
Viedma (ADN).- La Defensoría General del Poder Judicial sugirió que se ordene al Ministerio de Salud de Río Negro que deberá garantizar el tratamiento de salud adecuado a una niña que padece una patología que necesita atención permanente y especializada, concretamente registra episodios de obstrucción total de las vías respiratorias. La madre presentó un amparo porque adujo que en el hospital de Viedma no la atendieron bien.
El dictamen de la Defensoría data del lunes 8 y sugiere al Ministerio de Salud que designe un pediatra para la atención y seguimiento de la salud de la niña P, y garantizar mediante el sistema público de salud o la realización de los aportes económicos necesarios que la nena reciba las sesiones de rehabilitación que requiere su situación de salud.
Además, dispuso hacer saber a la directora del hospital Zatti que deberá instruir al personal de guardia sobre la patología de la menor y la atención de emergencia que, de manera urgente y sin dilaciones, requiere ante los episodios de ahogo.
Por su parte, la defensora María Custet Llambí observó que debió haberse dado intervención al organismo a su cargo, como representante del Ministerio Público Pupilar, desde el inicio de las actuaciones, con el propósito de “salvaguardar los derechos de la niña”, en línea con la doctrina legal del Superior Tribunal que dispone la necesaria y esencial intervención de la Defensa del Menor en todos los fueros y en todas las instancias.
Consta en el expediente que la madre, junto con un abogado, concurrió el 4 de este mes al organismo, donde describió el estado actual de salud de su hija y cuáles serían las necesidades de asistencia de la niña.
Así, refirió que la razón de la acción radicó en que la niña padece una patología que necesita atención permanente y especializada y por la cual presenta cotidianos episodios de obstrucción total de las vías respiratorias que requieren atención inmediata por parte del servicio de urgencias, la que “no le es brindada adecuadamente en el nosocomio local”.
Detalló que hace unos días la niña sufrió un ahogo severo y concurrió, junto a la abuela de la pequeña, al servicio de emergencias y señaló que “no fue atendida con la urgencia que requería, en tanto personal del hospital pretendía que esperara su turno poniendo en serio riesgo la vida de la nena”.
Agregó que luego de que la abuela de la niña, en una situación desesperada empujara al enfermero para darse paso a la sala de urgencias, fue atendida la pequeña y salvaron su vida. Aseguró que esa circunstancia le genera angustia, ya que teme que ante otro episodio de ahogo de la niña se repita su falta de atención en tiempo y forma por parte del sistema público de urgencias y los daños sean irreparables.
Además, relató que la niña requiere de sesiones de rehabilitación permanente cuatro veces por semana en la Fundación Facilitar (en Viedma) y que los costos de esta atención los solventa la abuela de la niña ante la falta de prestación por parte del sistema de salud publico.
Por último, manifestó la necesidad de que su hija tenga la asistencia directa de un pediatra que conozca la especial situación de salud de la niña, que pueda seguir el tratamiento de la misma e intervenir ante una situación de urgencia.
“Ello en tanto resulta de suma dificultad explicar reiteradamente, a cada uno de los pediatras que intervienen, la particular patología de la niña. P. necesita la atención de un profesional que conozca la patología, su historia clínica y se encuentre capacitado en la especial prestación sanitaria que requiere su delicado y especialísimo cuadro de salud”, concluyó la defensora. (ADN)