Reiterados ataques y descalificaciones de Pichetto ● Osvaldo Nemirovsci
Sigo creyendo que en la diversidad y el debate respetuoso se encuentran los mejores valores del peronismo para construir poder electoral.
Se equivocan quienes agravian en lugar de confrontar ideas.
Ante inexplicables y reiterados ataques y descalificaciones que vengo sufriendo por parte de Miguel Pichetto, quien tal vez confunda mi actitud respetuosa y mesurada con debilidad, me interesa hacer conocer que seguiré recorriendo la provincia sosteniendo un mensaje de amplia convocatoria basado en propuestas de gobierno que sean soluciones para las demandas insatisfechas de los rionegrinos.
Es en ese terreno donde deben distinguirse posiciones, de acuerdo a lo que cada uno entienda deberán ser las políticas públicas a implementar y no perder tiempo en insultos que en nada jerarquizan a quienes los utilizan como discurso de campaña.
Por eso, me parece inútil responder a quien no discute mis ideas, sino que, una y otra vez, cae en el agravio como si le faltaran, cosa que no creo, argumentos para el sano debate.
Pero si quiero dejar presente un par de cosas: No debe sentirse menoscabado nadie si no lo consideramos un candidato natural o no le reconocemos un liderazgo que pretende obligatorio. Precisamente, soy candidato en el FpV porque ofrezco otra mirada para devolverle centralidad al peronismo, recomponer el Frente para la Victoria y resolver los temas pendientes del atraso provincial.
Mi historia, conducta y ética militante habilitan esta pretensión y lo hago bajo nuestro conocido apotegma de «no creerme más que nadie pero tampoco menos que ninguno». Y en ese entendimiento respeto a todos los candidatos y no he tenido una sola palabra, fuera de lugar para referirme a ellos.
Las elecciones primarias que están votadas como ley por nuestra legislatura, que el gobierno intenta evitar y que espero el presidente de mi partido defienda con la misma tenacidad que pone en atacarme, serán en definitiva las que pongan a cada uno en el lugar que le corresponde y si, como dice Pichetto, él tiene todas las de ganar que mejor que llevarlas a cabo y de ser ese el resultado seré el primero en pedir una brocha y salir a pegar sus afiches para lograr el triunfo del FpV.
No creo que deba aclarar una mentira tan evidente como la que dice que recibo o tengo algún apoyo oficial del Gobierno rionegrino, cuestión esta que exijo de Pichetto rectifique inmediatamente para aventar irritaciones innecesarias, pero solo recuerdo que mientras desde mi espacio, hace mucho tiempo, comenzamos la campaña «Tarea pendiente 2015 – Un gobernador peronista», Miguel Pichetto se dedicaba a ponerle ministros a Weretilnek. Nuestro sector, la Corriente Peronista Federal agrupación que fundamos entre otros junto a Néstor Kirchner en 2003, no incorporó ni medio chófer a esta administración, cuestión que no nos hace mejores en sí mismo, pero si claramente nos ubica decidida y sin confusión como opositores.
Estimo que la calma personal es una virtud de quienes pretendemos gobernar, la mesura y las buenas formas siempre son valoradas por nuestro pueblo. Que nadie se ponga nervioso ni crea en destinos manifiestos. Estamos en una etapa de construcción de poder electoral y cualquier gesto de soberbia o desmesura, venga de quien venga, perjudica al conjunto.