ATE resolvió medidas de fuerza en Río Negro
Cipolletti.- El Plenario de Secretarios Generales de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), que sesionó en la ciudad de Cipolletti, resolvió por unanimidad volver a las medidas de fuerza en todo el territorio provincial.
El sindicato informó que «debatió sobre distintos temas que son de interés y preocupación para los empleados públicos. La discusión de los dirigentes, que llegaron desde distintos lugares de la provincia, se centralizó en la situación salarial, la aplicación del Decreto 664, el pase a la planta permanente y la situación de los trabajadores becados».
ATE decidió realizar una Jornada Provincial de Protesta el martes 28 de julio, «en rechazo del régimen de regularización de aportes al sistema de seguridad social creado por el Decreto 664 del Poder Ejecutivo. En este punto, la entidad gremial llama a todos los estatales a no adherir al referido decreto y optar por reclamar los derechos reconocidos en la Ley Provincial 4640».
En segundo lugar, la conducción sindical resolvió «reclamar por la insuficiencia del último aumento salarial otorgado, demandar un nuevo incremento de haberes, exigir celeridad en la reglamentación e instrumentación del pase a la planta permanente, regularizar la situación de los becados y poner un freno a la violencia laboral existente en la mayoría de los sectores. Para esto ATE llevará adelante un paro total de actividades por 24 horas que será abarcativo de todas la áreas públicas del Estado el jueves 6 de agosto. Además, para ese día el sindicato votó una movilización provincial a los puentes carreteros que unen las ciudades de Cipolletti y Neuquén».
«Hemos resuelto retomar las medidas de fuerza en toda la provincia. El Gobierno tomó decisiones políticas correctas como el pase a la planta permanente, pero no las hace efectivas», reclamó Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE y CTA Río Negro y agregó: «El Decreto 664 perjudica a miles de trabajadores en sus derechos. La muestra es más que clara: si Scalesi está contento con el decreto, quiere decir que nos quieren joder a todos los trabajadores».
«Seguimos perdiendo el poder adquisitivo de nuestros salarios. Los alimentos no paran de aumentar en las góndolas de los supermercados y lo mismo ocurre con otros bienes y servicios. El Gobierno debe otorgar un nuevo aumento de haberes, porque de lo contrario los empleados públicos rionegrinos seremos gravemente discriminados en relación a las otras provincias», concluyó el dirigente gremial.