Wisky:“La mala gestión del Estado le costó 200 millones de dólares a nuestros productores frutícolas”
General Roca.- El precandidato a diputado por el PRO-Cambiemos, Sergio Wisky, mantuvo un encuentro con productores frutícolas del Alto Valle, donde destacó que “hace cuatro años que tenemos ministros de Agricultura patagónicos, que parece que no se enteraron de lo que pasa en la región”.
El dirigente del PRO propuso mejoras fiscales, financieras y acuerdos comerciales con el exterior para mejorar la competitividad del sector. “Con el potencial que tiene nuestro país para alimentar al mundo, nos duele ver como la fruta se pudre a un costado de la ruta. Hace falta un cambio que libere esas fuerzas que hoy están contenidas”, dijo.
El precandidato a diputado por el PRO-Cambiemos, Sergio Wisky, dialogó con productores frutícolas de Cipolletti y General Roca, quienes le expusieron su preocupación por la situación del sector y la falta de respuestas desde el Estado.
“Nuestros productores, que son el gran motor de la economía y el empleo en Río Negro, están cansados de no encontrar respuestas por parte del Estado. La mala gestión les costó cerca de 200 millones de dólares, que hubieran significado un fuerte impulso para la economía regional, no sólo para los productores sino para el comercio, los servicios y cada uno de los trabajadores que se benefician cuando la actividad crece. Desde el PRO asumimos el compromiso de escucharlos y de llevar su voz al Congreso Nacional”, indicó Wisky.
El precandidato apuntó a “las políticas equivocadas de la última década” como responsable de lo que calificó como “una crisis grave no sólo del sector frutícola rionegrino, sino de todo el sector agrícola-ganadero del país, que viene reclamando desde hace años sin que se lo escuche”.
“Lo más grave, visto desde Río Negro, es que hace cuatro años que tenemos ministros de Agricultura de la Patagonia. Pero ni Yauhar ni Casamiquela parecen haberse enterado de la realidad de la producción en la provincia”, señaló, poniendo como ejemplo que “hay una caída en los precios internacionales, un aumento de la producción en Europa, una pérdida de competitividad en términos monetarios, un cierre del mercado ruso, un incremento de los costos internos, y una ausencia total de financiamiento. Todo esto va en contra de nuestras exportaciones, que representan el 75 por ciento de la producción. Mientras tanto, desde el Estado no hay ninguna respuesta salvo ver como le sacan más plata a los productores”.
“Desde el PRO, con Mauricio como Presidente, venimos a proponer otra cosa. Queremos un Estado que escuche y brinde respuestas, que se ponga del lado de los que trabajan y producen. Por eso tenemos una política para el sector agropecuario del país y, en particular, para el frutícola de Río Negro”, indicó Wisky.
El precandidato señaló que, de llegar al Congreso Nacional, impulsará “una suspensión de las retenciones a las frutas y los jugos por el término de un año, un incremento de los reintegros y compensaciones, diferimiento de pagos de contribuciones para así financiar al sector y medidas como la autorización del uso del saldo del IVA técnico para cancelar impuestos y cargas sociales”.
Asimismo, adelantó que un gobierno del PRO impulsará “medidas de fondo como un cambio de enfoque en el comercio exterior. Hoy estamos aislados del mundo y eso significa que nos cierren las puertas y nos apliquen sanciones. Tenemos que relacionarnos de una manera distinta”.
“Con el potencial que tiene nuestro país para alimentar al mundo, nos duele ver como la fruta se pudre a un costado de la ruta porque el Estado le da la espalda a los productores. Hace falta un cambio que libere esas fuerzas que hoy están contenidas y ese cambio se llama Mauricio Macri”, enfatizó Wisky.
“Tenemos que pensar un país distinto. Como dice Mauricio, no es el campo contra la industria. Es el campo y la industria. No es el campo contra la ciudad, es el campo y la ciudad. Si entendemos esto, los conflictos pronto serán parte del pasado y vamos a ser un país más unido”, explicó, detallando que “desde el PRO tenemos una visión integral del campo, centrada en miles de personas que en toda la Argentina producen para el país y el mundo. Y en las miles de personas que le agregan valor en los pueblos y en las ciudades y los millones de argentinos que consumen sus frutos”.
Wisky puntualizó que “a partir del diálogo con estos miles de personas desarrollamos una propuesta de cara a la gente. Con apertura de las exportaciones, una nueva estrategia de relaciones internacionales, reducción de los niveles de presión tributaria, infraestructura y políticas de fomento específicas. Podemos hacer todo esto si a partir de diciembre tenemos un gobierno que gestione mejor y, más que nada, pensando en cada uno de los argentinos”.