Presentaron un dispositivo para prevenir el ACV en pacientes con fibrilación auricular
Buenos Aires.- Un dispositivo para prevenir el Accidente Cerebro Vascular (ACV) en pacientes con fibrilación auricular fue presentado recientemente en la Argentina, una estrategia alternativa que ayuda a disminuir el uso de anticoagulantes y que ya se usa en Canadá y Estados Unidos.
Se trata de un nuevo dispositivo llamado ‘Watchman’, que “cierra de manera percutánea la orejuela izquierda en pacientes que puedan llegar a tener un bloqueo arterial o stroke”, explicó a Télam Fernando Scazzuso, jefe del servicio de Electrofisiología y Arritmias del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA).
“El 95 por ciento de la embolia cerebral proviene de la orejuela izquierda en pacientes con antecedentes de fibrilación auricular de origen no valvular. La orejuela es una estructura en fondo de saco -que se asemeja al gorro frigio del escudo nacional- y tiene funciones endócrinas y hemodinámicas dentro del corazón”, precisó.
Entre otras funciones, la orejuela regula la retención de sales y líquidos y contribuye al llenado del ventrículo izquierdo para aumentar la cantidad de sangre que se vierte al torrente sanguíneo.
“Sin embargo, cuando el paciente presenta una fibrilación auricular la sangre dentro de esa estructura circula a menor velocidad, favoreciendo el depósito de la sangre con su consecuente coagulación y formación de trombo”, señaló.
Y continuó: “En determinados momentos, como la alternancia entre el ritmo sinusal (ritmo normal) y la arritmia (fibrilación auricular), ese trombo es despedido de la orejuela y viaja por las arterias, impactando en general en alguna arteria cerebral y provocando una embolia”.
Scazzuso refirió que el cuadro se caracteriza por una hemiplejia o parálisis del hemicuerpo, sea derecho o izquierdo, desviación de la comisura labial o parálisis facial y caída del párpado del mismo lado o “ptosis palpebral”, lo que genera eventualmente el coma.
“Para evitar esa situación se usan drogas anticoagulantes, pero cuando no son efectivas se recomienda el implante de este tipo de dispositivo, que al ocluir la cavidad de la estructura impide la formación del trombo en su interior”, aclaró.
El especialista comentó que en el ICBA ya se realizaron varios implantes de estos dispositivos, que están cubiertos por obras sociales y prepagas y se presentan como una solución para aquellos pacientes con contraindicación para los anticoagulantes.
“El sistema Watchman está disponible en la Argentina desde hace unos meses y demostró ser tan eficaz como las drogas anticoagulantes por vía oral e incluso mejor que ellas”, enfatizó, aunque señaló que en un seis por ciento de los casos se dan efectos adversos por complicaciones durante el implante, como el “taponamiento cardíaco por sangrado”.
Y completó: “En el ICBA creemos que este tipo de terapéutica se posicionará en un futuro cercano como una opción de tratamiento frente al anticoagulante oral, debido a la simplicidad del procedimiento, su eficacia y la no necesidad de controles seriados, restricciones dietarias y complicaciones por el uso de drogas”.
La fibrilación auricular es la arritmia más invalidante que existe, ya que su principal complicación es la embolia cerebral y su consecuencia, la hemiplejia, que afecta a más hombres que mujeres a partir de los 55 años y perjudica hasta al 10 por ciento de la población de más de 75.
Ese tipo de arritmia puede no presentar síntomas, por lo que muchas personas no saben que la padecen.
Los síntomas más frecuentes son palpitaciones, fatiga o debilidad, mareos o desmayos, dificultad para respirar, dolor en el pecho o pulso irregular.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 15 millones de personas en todo el mundo sufren un ACV cada año y, de ellas, más de cinco millones mueren y otros cinco quedan con discapacidad permanente.
El ACV puede generar parálisis, dolor, pérdida del habla y la comprensión, y afecta la memoria, el pensamiento y los procesos emocionales.