El satélite argentino de telecomunicaciones alcanzó con éxito la órbita definitiva
El satélite alcanzó con éxito la órbita geoestacionaria de 81 grados Oeste, a unos 36 mil kilómetros de la Tierra, ocupando con la insignia nacional la posición orbital que peligró por falta de uso durante la etapa privatizadora de las telecomunicaciones en la década del ’90.
«Hoy la Estación Terrena Benavídez de Arsat dirigió de forma exitosa la última de las cinco maniobras de apogeo», lo que permitió que el segundo satélite de telecomunicaciones argentino llegara a órbita geoestacionaria, informó la empresa que lidera Matías Bianchi.
La órbita es casi circular y está ubicada en el plano ecuatorial, a unos 36 mil kilómetros de distancia de la Tierra, quedando el aparato en control desde la Estación Terrena Benavídez.
En detalle, el proceso consistió en que el Arsat 2 se desplazara en primer momento en una órbita de 250 kilómetros de perigeo -el punto más bajo-, hasta llegar a casi 36.000 de apogeo -el punto más alto-, cerca de donde se sitúa actualmente.
Así, el aparato se ubica como un transmisor en la punta de una elevadísima torre virtual, para irrigar su señal a un extenso territorio panamericano desde un punto fijo sobre la Tierra, geoestacionario, al girar en un período de 24 horas igual al del Planeta.
En total, la Estación Terrena Benavídez realizó cinco maniobras de apogeo los días 2, 4, 7, 8 y 10 de octubre; todas fueron precedidas por procedimientos de preparación, incluido el posicionamiento del satélite -que regularmente se encuentra orientado al Sol- en la dirección en que debe acelerado.
Las maniobras se realizan con la activación del motor principal del satélite en momentos de hallarse en el punto más alto de una órbita, lo que le permite adquirir órbitas más altas y más circulares.
«Durante las cinco maniobras todos los subsistemas de propulsión y autocontrol del satélite funcionaron correctamente», celebró la veintena de técnicos e ingenieros que vivieron pendientes del aparato desde su lanzamiento el 30 de setiembre, de la base Kourou, en Guayana francesa, al igual que hicieron con el Arsat 1.