Bronca en el Gabinete por el megaministerio que se armó Ibarra, mientras pide más ajustes
El ministro de Modernización, Andrés Ibarra, está en la mira de sus compañeros de Gabinete, enojados por la megaestructura que armó en su cartera pese a que es el encargado de hacer más “eficiente” al Estado nacional y diagramar los ajustes en los demás ministerios.
El portal LaPolíticaOnLine publicó que la bronca en el Gabinete estalló el miércoles cuando en el Boletín Oficial apareció publicada la estructura organizativa de la cartera de Ibarra y sus colegas notaron que lejos estuvo de optar por un esquema austero. Todo lo contrario.
Es que en los hechos, Modernización es la elevación a ministerio de la subsecretaría de Gestión y Empleo Público que funcionaba hasta diciembre pasado, más la incorporación de algunas funciones de la Secretaría de Gabinete y la Oficina Nacional de Contrataciones.
Pero aun así Ibarra armó un megaministerio con 4 secretarías, 9 subsecretarías, 19 direcciones y oficinas nacionales, y unas 90 coordinaciones (a los coordinadores el ministro le puede asignar las competencias de un director). Todo eso con el personal correspondiente y los fondos necesarios para que esas dependencias funcionen.
La bronca en el Gabinete es porque sostienen que esa estructura se arma a costa de los recortes en los demás ministerios, donde además cada mes tienen que llevarle a Ibarra un listado detallado de todos los empleados que tienen y, tras una revisión exhaustiva, en Modernización autorizan o no el pago de los sueldos.
Esto es porque Ibarra giró a los ministerios metas de despidos que deben cumplir como parte de la revisión de contratos que lanzó en diciembre pasado. Si no lo hacen, empiezan los problemas para pagar los sueldos.
La bronca por la estructura de Modernización es mayor porque se da justo en momentos de extrema tensión en varios ministerios por una nueva tanda de despidos. Es que ayer se vencían 25 mil contratos en la administración nacional y se estima que al menos mil no fueron renovados, aunque recién hoy el panorama iba a ser más claro respecto a la cantidad de contratos que se cayeron.