La CGT analizó su futuro, cuestionó a los «corruptos» y le pidió audiencia al Gobernador
(ADN).- La CGT de Río Negro volvió a dar señales públicas de vida con una reunión que se realizó en Allen, donde soplaron los mismos aires que vienen inspirando a la dirigencia nacional: trabajar por la unidad y mantenerse prescindentes de las cuestiones de política partidaria. Rubén Belich, el actual titular de la central obrera en la provincia y secretario general de camioneros, imitando a su colega Hugo Moyano, anticipó que dará un paso al costado «para dejar lugar a los jóvenes”.
En el plano de las reivindicaciones, surgieron fuertes cuestionamientos a la Secretaría de Trabajo provincial por su pasividad ante diferentes conflictos laborales y se resolvió pedir una audiencia al gobernador Alberto Weretilneck.
La jornada de trabajo se realizó el en el predio El Fogón de camioneros, distribuida la dirigencia en mesas de manteles blancos y buen servicio de cafetería. Y a medida que avanzaban las deliberaciones, se alistaban las parrillas para el almuerzo.
En un comunicado sostuvieron que los sindicatos se encuentran en asamblea permanente ante el aumento en las tarifas y la creciente inflación pidieron un encuentro con el Gobernador “para que entre el Estado Provincial y ésta Organización de Trabajadores se acuerden pautas de trabajo en el ámbito del Gobierno que corresponda, optimizando una estructura que brinde respuestas a las demandas laborales como debe ser”.
Sobre la sucesión en Río Negro, el gastronómico Ovidio Zúñiga dio señales de aspirar a la máxima conducción. Entra así en competencia con Jorge “Kutcha” Rodríguez, titular de La Bancaria del Alto Valle y, según los corrillos en el predio de camioneros, sería el preferido de Belich en una eventual puja con el barilochense.
Fue Zúñiga quien cargó con mayor vigor contra Rolando Troncoso, el dirigente del gremio de la sanidad ATSA designado por el Gobernador Alberto Weretilneck como Secretario de Trabajo. Como lo hiciera ya la conducción de ATE, también desde la CGT se consideró que la Secretaría de Trabajo “está ausente” de conflictos muy sensibles, como es el caso del frigorífico Arroyo donde no se resuelve un conflicto de varios meses. A su lado, y algo incómoda, estaba la secretaria Adjunta de ATSA filial Río Negro, Gloria Ovejero.
De la mesa cabecera también participaron Juan Carlos Scalesi de UPCN y Domingo Palermito, del sindicato de los trabajadores de la ANSES (SECAFSPI).
Belich, en una rueda de prensa que compartió con el petrolero Guillermo Pereyra, confirmó que dará un paso al costado en la conducción de la CGT provincial, para “darle lugar a los jóvenes” y adelantó que una vez ungida la nueva conducción “vamos a apoyar a muerte”. Luego lanzó una definición que fue un tiro por elevación al legislador y dirigente de la fruta, Rubén López: “Esto no es una mesa política, acá tenemos una mesa para defender a los trabajadores”. Luego en el plenario acotó sobre este punto: «Hay dirigentes muy buenos para conducir la CGT. No queremos corruptos».
Hasta el recito se acercaron los contendientes de López en las pasadas elecciones en al gremio de la Fruta, Carlos Aparicio sostuvo que «queremos transparencia. Es triste lo de nuestro Secretario General». Por su parte Luis Vega afirmó que “los dirigentes corruptos nos manchan a todos. Nuestro sindicato está manchado por denuncias».