El INTI verifica surtidores para evitar adulteración y evasión
(ADN).- La oficina de Cipolletti del Instituto Nacional de Tecnología Industrial monitorea los surtidores de las casi cien estaciones de servicio que hay en Río Negro. Su misión es evitar adulteración de combustibles y evasión fiscal.
Según los registros oficiales, no hubo sanciones ni clausuras como en otros puntos del país, donde se encontraron dentro de los surtidores dispositivos que podían alterar la medición.
Lo controles son anuales y se realizan con personal del INTI de la Patagonia. Su trabajo está cimentado en la Ley de Metrología que establece el régimen jurídico de la actividad metrológica del Estado, al que deben someterse, en defensa de la seguridad, de la protección de la salud y de los intereses económicos de los consumidores y usuarios, los instrumentos de medida en las condiciones que reglamentariamente se determinen.
Las primeras fases del control metrológico son la aprobación de modelo y la verificación primitiva, previos a que la balanza, el cinemómetro o el caudalímetro de granos o el butirómetro o el surtidor o cualquier otro instrumento de medida se comercialicen. A las restantes fases del control establecidas en la Ley, de verificación periódica y de vigilancia e inspección, son conocidas como controles de uso operativos.
La normativa ha asignando al INTI la verificación periódica en todo el país, mientras que la vigilancia de uso puede ser realizada por las autoridades nacionales, municipalidades o provincias.
El objetivo es sancionar el uso fraudulento de los instrumentos de medición o el incumplimiento de las reglamentaciones vigentes.