Agentes policiales del Servicio Penitenciario fueron imputados por vejaciones a detenidos
La Fiscal Julieta Villa promovió acción penal contra tres agentes policiales del Servicio Penitenciario Provincial, con funciones en el Establecimiento de Ejecución Penal Nº 2 de General Roca, por considerarlos autores del delito de vejaciones a internos del lugar.
Esta imputación se sustenta en cinco hechos diferenciados. El primero sucedió el 4 de mayo de este año, cuando un agente policial habría disparado con una itaca y perdigones de goma, en momentos en que varios internos se encontraban en el uso del horario de visitas, jugando al fútbol y encontrándose en el lugar menores de edad. El accionar del hombre, cuyo objetivo fue el de «provocar a los internos», no sólo puso en peligro a los menores que se encontraban en el establecimiento sino que algunas balas impactaron sobre el cuerpo de por lo menos uno de los internos.
El segundo hecho ocurrió el 7 de mayo pasado, mientras un interno recibía a un familiar. Un agente lo habría amenazado con su arma reglamentaria, apuntándole y propinando insultos y el tercer hecho, según indicó la fiscal, sucedió también en mayo, pero el 16,cuando tres empleados policiales, mientras varios internos se encontraban en el sector del patio jugando al fútbol, comenzaron a amenazarlos mediante insultos y tirándoles escopetazos con las itacas. Por este hecho, por lo menos cuatro internos resultaron lesionados, conforme a las certificaciones médicas incorporadas a las actuaciones.
Luego de esta situación, personal del Cuerpo de Intervenciones Especiales Penitenciarias (CIEP) ingresa al lugar buscando un celular que tendría un interno con el cual se habría filmado los disparos de itaca realizados por los agentes. Mediante insultos y amenazas, lo reducen propinándole golpes en la cara y costillas.
Mas tarde, en el momento de la requisa, personal policial interviniente separa a un grupo de internos que fueron trasladados al sector del lavadero, dónde se encontraban «otros efectivos policiales con sus rostros cubiertos». Tres efectivos del grupo de la requisa comienzan a golpear en el rostro y en las costillas a uno de los detenidos, mediante golpes de puño y patadas, provocándole lesiones que se encuentran debidamente acreditadas.
La representante del Ministerio Público Fiscal entiende que «existen elementos probatorios suficientes para acreditar la responsabilidad y el accionar de los tres agentes policiales», dejando abierta la individualización de otros policías y la posible ampliación de la acusación.
En relación a ésto, la fiscal solicitó una serie de medidas al Juzgado de Instrucción Nº 8, entre las que se destaca, el pedido de indagatorias a los tres agentes del servicio penitenciario por los hechos descriptos.