Desarrollo Social de Bariloche dispuso medidas para garantizar la seguridad en el CAINA
Se informó oficialmente que autoridades de la Delegación de Desarrollo Social de Bariloche dispusieron una serie de medidas para garantizar la seguridad de los empleados y menores alojados en el centro CAINA de esa ciudad, ante la una situación de violencia producida días atrás por familiares de pequeños en resguardo. No obstante, descartaron que esos episodios sean frecuentes o cotidianos, explicando que se trató de hechos aislados y particulares.
La nota oficia de respuesta a la información que daba cuenta de una reunión de trabajadores de ese organismo provincial en la ciudad andina, con la Defensora del Pueblo de Bariloche, Andrea Galaverna, donde se expuso de la situación de crisis que atraviesan luego de hechos violentos de los que fueron víctima operadoras y operadores de la Delegación de Desarrollo Social.
Ahora el delegado del Ministerio,Juan José Deco y el coordinador de Protección Integral, Nicolás Riquelme, descartaron que existan situaciones cotidianas de violencia hacia trabajadores y/o hacia la institución. “Es real que sucedieron un par de hechos aislados, por lo que en su momento se trabajó en las medidas para evitar que sucedieran y se tomaron otras para evitarlos a futuro, siempre con el correspondiente cuidado de la integridad de los pequeños allí alojados”, explicaron los funcionarios.
En el parte oficial descartaron terminantemente que hayan existido situaciones de maltrato o violencia hacia los niños, niñas y adolescentes alojados en los CAINA. No obstante, ante la aparición de casos aislados de terceros que intentaron violentar las instalaciones de esos dispositivos, se tomaron las medidas correspondientes, se dio intervención a la Policía y se evaluaron las denuncias pertinentes. Además se tramitó una guardia policial permanente en la Delegación.
Agregan que «no puede desconocerse que este organismo trabaja con situaciones sensibles, de vulnerabilidad y que en muchos casos, cuando se toman medidas proteccionales para con los menores, las familias reaccionan de manera violenta. Justamente, muchas veces es la violencia dentro del ámbito familiar la que impone las medidas proteccionales, y esa misma violencia luego puede trasladarse hacia terceros».
Se informó también que las medidas de protección que impliquen alojar a los niños, niñas y/o adolescentes en un lugar distinto a su hogar se toman con carácter restrictivo y excepcional, ante situaciones de gravedad y vulneración de derechos extremas. Las mismas son siempre convalidadas por el Poder Judicial.
Los funcionarios de la Delegación de Desarrollo Social de Bariloche, destacaron que “respaldamos y confiamos en los criterios técnicos de nuestros trabajadores cuando recomiendan tomar una medida de este tipo. No obstante, es curioso que un grupo de esos mismos trabajadores expongan en los medios aspectos que deben ser reservados a las familias intervenidas, a nuestro organismo y a la Justicia, tal cual lo imponen las leyes proteccionales cuando hay niños, niñas y/o adolescentes involucrados”.
Deco y Riquelme agregaron que “es llamativo que los propios trabajadores utilicen falacias ante esta situación, sin conocer los pormenores técnicos, legales y judiciales de ellas; aspectos que este Organismo no está dispuesto a revelar por la reserva que la ley impone”.