Por una silla de ruedas
(ADN).- Una violenta represión en el Penal 2 de General Roca, fue denunciada por Simon Ribeiro, responsable provincial de la Campaña Contra la Violencia Institucional, con disparos y gases lacrimógenos
en el pabellón Nª 5, de esa unidad carcelaria, que aloja a 10 presos,donde resultaron heridos varios internos.
Se denunció que esta situación comenzó a raíz del reclamo de un interno de llamado Pablo, quien se moviliza con una silla de ruedas. La silla se rompió y dejó a Pablo se rompió postrado en una cama hasta que se la devuelvan arreglada.
Según se denunció por parte de los propios internos que una vez reparada la silla de ruedas, el personal del servicio penitenciario no se la quiso dar, porque «la entrega de cosas se hace los martes»
Pablo, que además tuvo una traqueotomía, no podía moverse y concitó el reclamo de sus compañeros, para que le entreguen la silla. La respuesta fue entrar al pabellón tirando gas lacrimógeno, golpeando, disparando. Al mismo Pablo, que no podía respirar por el gas y su traqueotomía, mientras le pegaban bastonazos le exigían que se levante y le dispararon en la pierna con una escopeta a muy corta distancia, indica la denuncia.
«Desde la Campaña Nacional Contra la Violencia Institucional expresamos nuestro más profundo rechazo a este tipo de prácticas, e invitamos a las instituciones del Estado y no gubernamentales a hacer lo mismo. Porque la cárcel no está al margen de la ley, necesitamos que el Ministerio Público Fiscal vaya a fondo con estas cuestiones y devele qué fue lo que paso y quiénes fueron los responsables. La política penitenciaria tiene que dar un giro y olvidarse de las prácticas abusivas que hacen recordar a las épocas más oscuras de la humanidad, y rescatar el valor a la dignidad humana», se expresa en un comunicado de la organización.