Nueva reunión por el Castello. Continúa el debate
(ADN).- Esta mañana legisladores de todos los bloques volvieron a reunirse para tratar de avanzar en acuerdos por el Plan Castello. El Frente para la Victoria formalizó sus pedidos de «garantía» para que los fondos lleguen a los municipios y las obras se ejecuten. La semana que viene habrá otro encuentro.
De acuerdo a la información que pudo recabar esta agencia, hay conclusiones diversas. El oficialismo se mostró permeable a los cambios que propuso el FPV, aunque no confirmaron las modificaciones. Previa consulta a la Casa de Gobierno, la semana próxima responderán. Para la UCR y el Frente Progresista «no hubo» avances. «Chicanas al por mayor» dijo un asistente.
La referencia es a los pedidos del bloque opositor para que los fondos lleguen a un fideicomiso del Banco Nación. Así, dicen desde el PJ, se evita que el dinero vaya a pagar sueldos. Pero no es la única cláusula que pide esa bancada. Prentenden que un porcentaje del bono se coparticipe con los municipios y que una parte se otorgue como aporte no reintegrable para aliviar las deudas de las ciudades.
Hay debate. Se intentan acuerdos. Avances y retrocesos. Ya hubo una reunión la semana pasada.
El tema central es que los intendentes quieren las obras. Este es un año electoral y «no hay nada que mostrar». Lo mismo le pasa a la Provincia. Cambió el país, cambió el sistema de distribución de fondos y obras. Durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner había concentración de dinero en Buenos Aires, como ahora, pero intendentes y gobernadores lograban asistencia. Eso se acabó.
Weretilneck lo sabe. Por eso pidió al Parlamento rionegrino el permiso para un empréstito en dólares. Un bono de 580 millones que financie obras.
El enduedamiento es mucho y a largo plazo. Por ahora, algunos legisladores adelantaron su rechazo, pero otros trabajan para lograr su aprobación.
Hoy, el ministro de Gobierno Luis Di Giácomo, dijo en una radio: la pelota está en el campo de la oposición, deberán explicar ellos en sus pueblos por qué no quieren las obras. Algo de razón tiene. Los jefes comunales deben validar su poder territorial. Algunos lo harán este domingo. Otros en 2019. Y todos necesitan mostrar gestión para traccionar en favor de sus candidatos a diputados nacionales en octubre.