Puertos patagónicos: sin quórum para el DNU
La sesión que se estaba llevando a cabo en la Cámara de Senadores se quedó sin quórum cuando estaba por debatirse la validez de un Decreto de Necesidad y Urgencia sobre reembolsos a los puertos patagónicos.
Los senadores debatían un dictamen de rechazo al DNU del presidente Mauricio Macri que eliminó el sistema de reembolsos a puertos patagónicos y estaba previsto que la oposición impusiera su mayoría para aprobarlo pese a las objeciones del minoritario bloque oficialista.
La sesión era presidida por el vicepresidente primero del Senado, el oficialista Juan Carlos Marino, dado que el presidente provisional de la Cámara, Federico Pinedo, se sentó en su banca para pronunciar un discurso en contra del dictamen de rechazo al DNU.
Pinedo presentó una moción para que el dictamen volviera a comisión pero además del oficialismo sólo estaban en el recinto los senadores patagónicos (que impulsaron el rechazo al DNU) y el ala kirchnerista del bloque PJ-FPV.
Ese sector notó que no tenía el número suficiente para rechazar la moción de Pinedo y decidió levantarse de sus bancas para dejar sin quórum la sesión y ganar tiempo hasta reunir nuevamente a la mayoría opositora y ganarle la pulseada al oficialismo.
La estrategia se basaba en una cuestión reglamentaria: cuando la sesión se queda sin quórum, el presidente debe llamar a los senadores y esperar 15 minutos. Sin embargo, Marino obvió ese paso reglamentario y levantó la sesión inmediatamente por falta de quórum, lo que tomó por sorpresa al kirchnerismo.
Luego de que se cayera la sesión y tras una hora de confusión en el recinto, los senadores del PJ-FPV se reunieron a puertas cerradas en el segundo piso de la Cámara, donde el kirchnerismo tenía previsto pedir que se impulse una sanción contra Marino por no haber respetado el reglamento, pudo saber la agencia NA.
Todo eso ocurrió en medio de una fuerte tensión entre el jefe del bloque PJ-FPV, Miguel Pichetto, y una gran cantidad de senadores de esa bancada, que se habían negado a votar un proyecto del Poder Ejecutivo, a contramano de lo que pretendía Pichetto, que se había pronunciado a favor de la iniciativa.
«Si mi bloque no me va a acompañar voy a tener que evaluar lo que voy a hacer en el futuro», expresó Pichetto en el recinto en medio de la polémica. El jefe del bloque se vio obligado a aceptar la postura del resto de los senadores de la bancada, entre quienes se encontraban no sólo los más leales a Cristina Kirchner, sino también otros que siempre respondieron a Pichetto, como José Mayans y José Alperovich.