“El caso Muñoz para nosotros es un tema muy difícil»
(ADN).- Alberto Weretilneck confirmó que el secuestro y asesinato del policía Lucas Muñoz en Bariloche «es un mensaje muy contundente». Si bien no profundizó, volvió a poner bajo la lupa a la conducción de la fuerza en aquel momento. Reconoció que es un «tema muy difícil», admitió que se equivocó al irse de la ciudad el día que apareció el cuerpo y criticó la falta de avances en la causa.
“El caso Muñoz para nosotros es un tema muy difícil. No sólo por la familia, porque uno ve la impotencia y los entiende, sino por haber sido un efectivo de la Policía de Río Negro porque el mensaje es muy contundente: un efectivo con su uniforme, con su arma, secuestrado, llevado por la fuerza a plena luz del día, que haya estado 25 días sin saber dónde está y después asesinado cuando quisieron… es todo un mensaje para el Estado y seguimos sin saberlo”.
Las declaraciones del gobernador fueron en el programa «De la A a la Z» en Canal 6. Fue el miércoles por la noche. Habló también de la reunión con ministros nacionales por la desaparición de Santiago Maldonado (que fueron reproducidas ayer por esta agencia), de las paritarias en Río Negro y respondió un ping pong sobre personalidades de la política nacional, provincial y local.
Weretilneck reiteró que fue “muy llamativo» el caso Muñoz, e insistió en responsabilizar a las autoridades policiales de aquel momento, que “no reaccionaron como reacciona la policía habitualmente” y “no hubo un protocolo de búsqueda ni un alerta”. “Tenemos demostrado la adulteración del libro de guardia” aseguró, cuestionando las actuaciones judiciales ya que finalmente los jefes policiales fueron sobreseídos en las causas conexas. Sumó a ese hecho el allanamiento ilegal, la compra del chip en Catriel y “el comportamiento del 911 esa noche”. “Nos quedamos a mitad de camino” definió respecto a la causa judicial, apuntando principalmente a la Fiscalía y a la querella.
Consultado sobre los motivos de su ausencia en Bariloche el día que encontraron el cuerpo de Lucas Muñoz, respondió: “me equivoqué”. “En el caso de Muñoz lo que pasa es que no evalué correctamente ese día cuando estaba en Bariloche el hecho de irme, pero no me fui por un hecho puntual. Habíamos hablado con los padres la semana anterior, el vínculo era normal” recordó. “Tuve un acto fallido mal cuando pensé que lo mejor era, si la Policía está bajo sospecha, que el gobierno no esté presente en el lugar para que no se malinterprete cualquier tipo de sutuación. Evidentemente a la luz del tiempo este fue un error y los barilochenses lo tomaron como que los deje solos” admitió.