Se abandonó el proyecto de regadío del Valle inferior
(Por Héctor Jorge Colás).- El pasado cinco de septiembre a través del diario Río Negro tomé conocimiento de la decisión del Estado Nacional de convocar a grupos privados para la financiación de varios proyectos de riego con un total de 73.000 hectáreas. Entre ellos se incluye la sistematización de 58.509 hectáreas en la zona del Valle Medio de Río Negro conocida como “Negro Muerto”.
Siempre es bueno enterarse de una iniciativa que apuesta al trabajo y el crecimiento. Pero en planes de desarrollo equivalentes siempre deben respetarse las prioridades pendientes.
Hace 39 años que el proyecto de regadío del Valle Inferior del río Negro esta paralizado. Ningún gobierno constitucional a partir de 1983 se interesó por la reactivación y culminación del emprendimiento. Tampoco los partidos políticos que actúan en Río Negro, ni sus candidatos incluyeron entre sus propuestas la iniciativa de irrigar un área de 73.500 hectáreas en los alrededores de la capital histórica de la Patagonia.
Nadie tuvo la intención política de reanudar el proyecto de desarrollo planificado en 1946 por el Presidente Juan Domingo Perón, iniciado en 1951 por el Gobernador justicialista Emilio Belenguer, continuado en 1958 por el gobernador radical Edgardo Castello y, en 1973, por el mandatario peronista Mario José Franco. Las tareas fueron continuadas por gobernadores civiles y militares hasta que, en 1978, el entonces interventor militar en la provincia, contralmirante Carlos Alberto Acuña, paralizó las obras.
En el año 2014 la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el Plan Nacional de Riego que pretendía elevar la actual superficie irrigada de 2,1 de hectáreas a 4 millones de hectáreas en un plazo de 16 años.
El entonces ministro de Agricultura Haroldo Lebed, hace tres años en conferencia de prensa señalaba que en ese proyecto “la provincia de Río Negro podría ampliar su superficie irrigada de las actuales 110.000 a 480.000 héctareas».
El Valle Inferior necesita 55.000 hectáreas que nadie reclama. La Ley 200 de creación del IDEVI está vigente y determina en su artículo quinto que “la provincia declara su intención y propósito de ejecutar íntegramente las ocho etapas del programa de desarrollo agrícola del Valle Inferior.
El gobierno de Río Negro no incluye este proyecto en sus planes denomindos “Castello” y “Patagonia”. Tampoco incide ante el Gobierno Nacional para incluir este emprendimiento de desarrollo iniciado hace 66 años cuando todavía Río Negro era Territorio Nacional.
La ciudadanía, el pueblo y sus instituciones están facultados para demandar con firmeza la culminación de las obras del riego del Valle Inferior. No se puede desaprovechar la magnifica conjunción entre el agua abundante de buena calidad que brinda el río Negro y los valles con tierras fértiles en un clima templado que espera, hace muchos años, la mano del hombre para producir variadas líneas de alimentos que el país y el mundo reclama.