La planificación, una deuda provincial
(ADN).- En diciembre del 2015, fue sancionada por la Legislatura de Río Negro, en única vuelta, por acuerdo de ministros, la ley de creación del Instituto Autárquico de Planificación para la Integración y el Desarrollo de la provincia (IAPID), pero aún se espera por su funcionamiento desde el Ejecutivo rionegrino.
Esta iniciativa fue impulsada por el vicegobernador Pedro Pesatti y su financiamiento estaba garantizado con el aporte del 1% de las regalías, estimadas en su momento entre 15 y 17 millones de pesos.
Estaba previsto que la mesa directiva del Instituto se constituiría de manera inmediata a la publicación de la ley y en un plazo no mayor a 90 días estaría en funciones el director ejecutivo del organismo.
Sería ingenuo presuponer que el desinterés por el funcionamiento de este Instituto es producto del olvido, falta de presupuesto o porque no se encontró quien conduzca el organismo.
Por el contrario, el origen está en la matriz misma del gobierno que nunca puso el acento en la planificación y en la importancia de elaborar proyectos a largo plazo en el marco de un perfil de provincia consensuada y participativa. En esta línea podría afirmarse que la secretaría de Planificación pasó inadvertida en su rol estatal y sólo hubo interés en los contratos con el CFI.
Vale otra mención. El decreto 1211 del Poder Ejecutivo aceptó renuncia de María Guillermina Forchetti, a partir del 1 de septiembre de este año. Había asumido esas funciones en enero del 2016. La ex funcionaria estaría trabajando ahora en la Universidad Nacional de Río Negro y nunca se explicaron los motivos de su dimisión y quien la reemplaza.
A todo esto, la Secretaría de Planificación, que se encontraba en la órbita de la secretaría General, pasó a depender de Economía, oportunidad en que el ex ministro Isaías Kremer confirmó que Gabriela Forchetti sería su titular y que esa Secretaría pasará a denominarse “Planificación y Desarrollo Económico”, concentrando el Crear y la Unidad de financiamiento Externo (Upcefe)”.
Incomprensible si se tiene en cuenta la creación del Instituto Autárquico de Planificación para la Integración y el Desarrollo de la provincia (IAPID).
Pensar en un Estado moderno y con proyección de futuro no es posible sin la planificación. Este concepto es depreciado y menoscabado.
Pedro Pesatti, al fundamentar sobre este Instituto Autárquico de Planificación, dijo en aquel momento que “será una herramienta del Estado en acción para el desarrollo” y que no tendría personal de planta, ya que sólo habrá contratados para cada planificación.
El organismo financiado de manera automática y directa con el equivalente al 1% de los ingresos de las regalías y una transferencia similar a la que reciben los municipios con un “goteo diario” y elaborará “planes de políticas públicas de largo plazo, que promuevan la integración y el desarrollo” de Río Negro.
Planificar el futuro, tendrá que seguir esperando a pesar de la voluntad expresa de los legisladores.