El Gobierno blanqueó los detalles del acuerdo con el FMI
El gobierno nacional dio a conocer la carta de intención ante el FMI por el acuerdo stand by en el que se compromete a cumplir con las metas de inflación preestablecidas y a reducir el déficit. Con la firma del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y del presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, le pide al Fondo «apoyo al plan económico» de la Casa Rosada.
«El plan ha sido diseñado por el Gobierno argentino y consideramos que es el adecuado teniendo en cuenta nuestra situación política, económica y social actual», dice en el texto de 33 carillas, que publicó el sitio Infonews.
El gobierno de Mauricio Macri acordó un crédito de 50.000 millones dólares en stand by, el primer tramo será de 15.000 millones y llegará en los próximos días. De acuerdo con lo que adelantó el Ministerio de Finanzas, la mitad de ese monto inicial cubrirá la demanda de dólares en el mercado local.
«Uno de los ejes centrales de nuestro plan económico es acelerar el ritmo al que venimos reduciendo el déficit primario del gobierno nacional desde 2016”, promete el texto. “Reafirmamos nuestro compromiso con alcanzar el equilibrio fiscal y llevaremos a cero el resultado primario del gobierno nacional en 2020», agrega.
El documento estipula una inflación de un dígito para 2021 y promete bajar el gasto público «hasta llevarlo a niveles adecuados y sostenibles, lo que resulta fundamental para alcanzar tanto el equilibrio fiscal como macroeconómico».
«Consideramos que el esquema fiscal de mediano plazo elegido garantizará que la deuda pública bruta como porcentaje del PBI caiga a partir de 2018, alcanzando el 55,8% del PBI hacia fines de 2021”, estipula.
“Estamos comprometidos también a llevar adelante un manejo proactivo de la deuda para alargar la madurez de los títulos, optimizar el costo de nuestros pasivos y aumentar el porcentaje de la deuda pública nacional denominada en pesos», sigue.
Luego declara que en octubre de 2018 enviarán la Ley de Presupuesto al Congreso “que apunta a un déficit primario del gobierno nacional de 1,3 por ciento del PBI en 2019, siendo esta una de las metas estructurales de nuestro programa».
Además asegura que “este ritmo de convergencia hacia un presupuesto balanceado del gobierno nacional irá acompañado por el esfuerzo de las provincias, cuyo balance primario consolidado se espera que pase de – 0,4 por ciento en 2017 a un superávit de 1/4 por ciento del PBI hacia el final del período del acuerdo Stand-By».
“Si las circunstancias cambiaran y los resultados económicos fueran peores a los anticipados, estamos preparados para identificar medidas adicionales que nos permitan alcanzar nuestros objetivos de déficit primario para 2018 y 2019”, se ataja.
El plan económico también incluye: reducción de los subsidios a la energía y el transporte, «racionalizar el empleo público, que se irá reduciendo», reducir el gasto en compras de bienes y servicios por parte del gobierno, postergación de obra pública que no sea «esencial para dinamizar la competitividad de nuestro país», y reducir las transferencias asociadas con el déficit operativo de las empresas públicas.
(Fuente: Infonews)