Solano. Piden el pase a disponibilidad de policías
(ADN).- El abogado Sergio Heredia, quien junto a su par Leandro Aparicio, ejercieron la querella en el caso abierto por el asesinato del jornalero salteño Daniel Solano, reclamó que el gobernador Alberto Weretilneck pase a disponibilidad a los 7 policías que ayer fueron condenados porque “debido a una gran incoherencia de la Ley Orgánica de la policía de Río Negro, como la sentencia aún no está firme, estos asesinos se ponen la pistola en la cintura y se presentan a trabajar en una comisaría”.
Heredia se manifestó “satisfecho a medias” con la sentencia obtenida, en la cual los magistrados indican que los policía acusados actuaron con “alevosía” y que todas sus acciones que delatan encubrimientos, aprietes de testigos y pistas falsas, no hicieron más que confirmar que formaron parte de un plan para ejecutar a Solano.
“El policía Sandro Berte podría presentarse mañana mismo a trabajar en la comisaría de El Bolsón”, alertó indignado el abogado, quien fue muy crítico con la investigación porque a su criterio “la Justicia de Río Negro no puede ver una mosca en su propia nariz”, y realizó –en declaraciones radiales-, un raconto de los distintos elementos de prueba que acercó la querella a pesar de la reticencia de las autoridades judiciales.
Aseguró que además de los 7 condenados, se debería avanzar en la investigación sobre 3 uniformados que estaban el día de los hechos en el boliche, y sobre dos comisarios que fueron al frente de la investigación y fueron tildados de “encubridores” por Heredia.
“La Justicia no investigó nada, la fiscal Marisa Bosco llegó a decir que Daniel estaba en Neuquén, cuando todas sus pertenencias estaban en Choele Choel”, exclamó, y a eso sumó su enojo “por la maniobra burda de la fiscalía de querer convertir este hecho en un caso federal apuntando a la desaparición forzada de personas”.
Se aclaró que aún están pendiente de resolución “25 causas conexas” y para el abogado es necesario que se avance para determinar “la protección a Expofrut”, empresa para la cual la víctima trabajaba y según múltiples testimonios que obran en el expediente, “pagaba muy mal”.
Heredia, para graficar la falta de colaboración de la Justicia provincial y el hostigamiento de la policía, recordó que desde el inicio de la denuncia en el año 2011 “viví 5 años en una iglesia custodiado por la Gendarmería”, y calificó como clave el rol de Walberto Solano, que llegó a encadenarse para pedir que avanzara la investigación.
Adelantó además que insistirán con llegar al fondo del jagüel que está en un campo de Expofrut, pocos kilómetros al norte de Choele Choel. “Nos faltan apenas 10 metros”, dijo, y recordó que “pusimos plata de nuestro bolsillo, más de un millón y medio de pesos”, para perforar y buscar los restos de Solano en ese pozo.
Heredia consideró además, que hay otras 5 muertes sospechosas en torno al caso Solano, que deberían ser investigadas.
Por último, volvió a manifestar su preocupación porque “tenemos 7 personas condenadas por asesinato que hoy siguen siendo policías”.