Cárdenas y Carrasco recibieron disparos de escopetas
(ADN).- El perito Luis Alonso, integrante de Criminalística de Gendarmería Nacional, confirmó que las balas que mataron a Sergio Cárdenas y Nicolás Carrasco salieron de escopetas. Así lo atestiguó en el juicio oral que investiga la participación policial en el caso.
Alonso se desempeñaba como jefe de la Policía Científica del Escuadrón 34 de Gendarmería Bariloche en junio de 2010, y realizó una pericia solicitada por el fiscal Marcos Burgos, con el objetivo de determinar el posicionamiento de las víctimas y de personal de la fuerza de seguridad, y si las postas provenían de escopetas de uso policial.
Cabe recordar que las muertes de Cárdenas y Carrasco se dieron en el marco de una represión en los alrededores de la Comisaría 28 de Bariloche el 17 de 2010, cuando un grupo de vecinos protestaba por el asesinato -la madrugada anterior- de un joven del barrio a manos de un policía, que -luego- fue condenado a cadena perpetua.
El perito respondió que le entregaron escopetas, cartuchos y postas extraídas del cuerpo para analizar. Señaló que las postas pertenecían a un cartucho 12 y las postas son doble cero. En ese sentido, aclaró que las postas la puede usar otro cartucho.
Con respecto a la distancia pudo dimensionar que la misma fue estimada. En la persona que tiene un solo disparo (Cárdenas)” es imposible de determinar”. Según afirmó, “una sola trayectoria, no se puede evaluar, no era un impacto directo, sino un rebote».
En el otro caso, -Carrasco- según la autopsia tuvo cuatro disparos. Trabajaron con tres postas. El rango de distancia desde donde se efectuó el disparo, de acuerdo a sus conclusiones, oscila entre los cuarenta y sesenta metros.
El perito confirmó que logró posicionar geográficamente el lugar donde estaban las víctimas, de acuerdo a las declaraciones. En este sentido dijo que Cárdenas estaba apoyado en una pared y Carrasco en la vía pública.
Se compararon las postas y coinciden, las extraídas de los cuerpos y las secuestradas. Es decir y de acuerdo al trabajo pericial realizado, que las heridas que presentaban las dos personas víctimas fueron disparadas por escopetas. En su testimonio respondió pluralidad de preguntas de la querella y la defensa en relación a estructura de armas, su alcance, las diferencias entre «tumberas» y escopetas.
Sumaron su testimonio las vecinas Yamile Muena, Patricia Ether Santos y Alejandra Riquelme. Las tres mujeres hicieron un detalle de lo ocurrido en la fecha del hecho. Coincidieron en marcar las condiciones que se dieron en el escenario de los hechos, en inmediaciones de la Comisaría 28. Ello luego de que la gente del barrio se enterara del fallecimiento del joven Diego Bonnefoi.
En este sentido manifestaron que personal policial reprimía a todas las personas, que no se podía respirar por los gases lacrimógenos y que efectivamente los chicos del barrio arrojaron piedras. Una de ellas fue herida cerca de uno de sus oídos, tuvo una esquirla de perdigón de plomo y fue atendida en el hospital zonal.
Alejandra Riquelme recordó haber visto a su cuñado (Sergio Cárdenas) entre las 16 y las 17. “Estaba parado en la garita charlando» afirmó. Recordó que ese día Cárdenas y su hijo habían festejado el partido de fútbol. La testigo Muena, dijo haber visto esa tarde a Nicolás Carrasco.
También fue lastimada y aún tiene un proyectil en el brazo.
(Foto: Bariloche2000)