El pichettismo se abroquela y espera su turno
(ADN).- «El peronismo que viene», exclamó un dirigente pichettista que participó del aniversario de Pilcaniyeu y compartió escenario con el gobernador Alberto Weretilneck. Los leales al senador fueron a respaldar al
“Chango” Ayuelef, uno de los «heridos» que dejó el cierre de listas del Frente para la Victoria.
Hasta allí llegaron el intendente de Campo Grande, Pedro Dantas, los legisladores Ariel Rivero y María Maldonado, y la senadora Silvina García Larraburu quien ya no pertenece al sector, pero no participa en la campaña de Soria gobernador.
Uno de los asistentes le dijo a esta agencia que «fue un respaldo al intendente de Pilca, un amigo». Así, le bajó el tono a un entendimiento (bajo cuerda) electoral con Juntos. Incluso, dijo que lo «rodearon» al Chango para que «el escenario no le quede solo al gobernador». Pero la foto, hizo ruido en el FPV.
Según dijeron, esperan su tiempo.
La relación entre pichettismo y sorismo siempre fue tensa y cargada de suspicacias. Comenzó en la elección de 2007 cuando Miguel Pichetto perdió con Miguel Saiz y se reforzaron en 2015, en otra derrota del Senador, esa vez a manos de Weretilneck.
Afuera del armado del PJ, el sector se siente liberado. Y se abroquela esperando su turno.