Gobernadores objetan el Acuerdo. Contrapropuesta
El llamado del Gobierno nacional a los gobernadores de la oposición para alcanzar un consenso de diez objetivos de largo plazo tuvo una recepción con matices en las provincias, donde si bien se valoró la convocatoria por la necesidad de alcanzar acuerdos, también hubo críticas al presidente Mauricio Macri, tanto respecto al contenido de la carta de intención como a los tiempos y objetivos finales.
Hubo, sin embargo, un esbozo de lo que podría derivar luego en una contrapropuesta consensuada entre todos los mandatarios. El ministro del Interior Rogelio Frigerio inauguró rondas con dos peronistas, el chaqueño Domingo Peppo y el entrerriano Gustavo Bordet.
Los encuentros se realizaron en las oficinas del funcionario de Macri en la planta baja de la Casa Rosada. Peppo pidió incorporar dos puntos más al acuerdo, un referido al tema de tarifas de servicios públicos y otro a la posibilidad de congelar despidos “porque esto también hace a la incertidumbre”, dijo. Y solicitó que se agilicen las obras. Bordet, por su parte, destacó la necesidad de incorporar al acuerdo el desarrollo de las economías regionales.
“Vamos a estudiar los puntos. Este es un primer paso. La idea es poder hacer una evaluación, consultar también con otros gobernadores de nuestro mismo signo político y también de otros signos políticos con los cuales tenemos muchas coincidencias, y luego daremos una devolución sobre los aspectos que consideramos se deban incluir”, precisó.
Entre los mandatarios que tienen proyección nacional, el cordobés Juan Schiaretti evitó hablar del tema, enfocado en las elecciones del domingo donde buscará la reelección en la provincia.
El salteño Juan Manuel Urtubey, con precandidatura presidencial lanzada, ya había manifestado que “negarse a debatir sobre cómo solucionar los temas que le importan a la sociedad sería antidemocrático y lograr consensos entre todos sería una demostración de madurez política”. Aunque consideró que “hubiese sido mejor que estos puntos los discutamos al inicio de la gestión del Gobierno y no hacerlo en tiempos electorales y con la crisis que tenemos”.
También el sanjuanino Sergio Uñac, con un ojo puesto en las provinciales del 2 de junio y otro en las nacionales de octubre, se refirió a la convocatoria con conceptos similares: aunque aceptó sumarse al diálogo, dijo que está a “destiempo” y que faltan agregar puntos, en especial respecto a “producción”. El también justicialista Sergio Casas dijo desde La Rioja que “llegó un poco tarde” la carta nacional. Lo mismo opinó el tucumano Juan Manzur, quien dijo que “la convocatoria tendría que haber sido en 2015. Nunca nos consultaron nada cuando tomaron las deudas ni cuando fueron al FMI”.
En esa línea, el santiagueño Gerardo Zamora del Frente Cívico, sostuvo que tuvo siempre “un buen diálogo con el Gobierno”, aunque no comparte “la política económica y el modelo económico”. Y adelantó que no apoyará los puntos referidos a reformas laborales y jubilatorias porque llevan a “flexibilización laboral y pérdida de derechos para los trabajadores”. Asimismo, llamó a un gran frente opositor para las elecciones de octubre.
Similares fueron las declaraciones del socialista Miguel Lifschitz, quien dijo que si bien “nunca es tarde para el díalogo”, sirve si “se modifica el plan económico”. En esa línea, expresó que el Gobierno hizo el llamado “al revés”. “A los consensos hay que prepararlos, conversarlos, buscar adhesión y hacer un temario antes de redactar un documento”, aclaró el gobernador de Santa Fe.
Entre los mandatarios más críticos de Cambiemos, Alberto Rodríguez Saá cuestionó sin concesiones al Gobierno nacional. “No vamos a negociar con Nación”, disparó el puntano. “Hace unos días recibí una carta de Presidencia en la que se convoca a la oposición para firmar un acuerdo y ‘llevarle tranquilidad a los mercados’. Presidente Macri, ¿por qué no hablamos de darle tranquilidad al pueblo argentino?”, dijo el gobernador de San Luis, quien se prepara para retener el poder el 16 de junio.
En Formosa, Gildo Insfrán le dio la espalda al llamado. “Jamás fuimos consultados por las decisiones que ha tomado el Gobierno nacional para llegar a esta situación. El formidable endeudamiento, el acuerdo con el FMI”, sostuvo Insfrán en una carta dirigida al Macri. “No es con palabras ni declaraciones formales y mucho menos eslóganes que se demuestran las verdaderas intenciones, sino con acciones concretas”, añadió el formoseño.
También el chubutense Mariano Arcioni criticó la carta de Macri. “La voy a responder, pero son convocatorias netamente electoralistas, con diez puntos prefijados e impuestos no es pare de la búsqueda de consensos”, manifestó. Y agregó: “No hay ni siquiera una autocrítica de lo que ha ocurrido, uno lo va a tomar con la responsabilidad y el respeto institucional como corresponde al devolver una respuesta, pero no me convence la honestidad de cada una de esas palabras”.