Diseñan un bloque «aliado» a AF. Lo integrará Di Giácomo?
(ADN).- Se están llevando adelante en Buenos Aires negociaciones reservadas para gestar en la Cámara Baja del Congreso de la Nación, un bloque de legisladores aliado con Alberto Fernández a partir de diciembre.
De concretarse, será importante la definición de partidos provinciales, como es el caso de Juntos Somos Río Negro, donde su candidato a diputado nacional Luis Di Giacomo había apoyado la candidatura de Miguel Pichetto -y Macri- el 11 de agosto, pero que ahora volverá a orejear las barajar. El actual Ministro de Gobierno rionegrino está muy cerca de ingresar al Congreso, si mantiene su caudal electoral de las PASO en octubre.
El bloque “dialoguista” estaría conformado por quienes hoy están por fuera del Frente de Todos.
Emilio Monzó (actual presidente de la Cámara y dirigente del PRO), aportaría sus legisladores. Se sumarían lavagnistas, partidos provinciales y sondean al gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, lo que daría un número final de diputados que alcanzaría para aprobar leyes claves.
Según reveló La Política On Line, de repetirse en octubre el triunfo del Frente de Todos, le permitiría a Fernández estar en 120 diputados, a 9 del quórum. De esta manera se abre la posibilidad de un bloque «dialoguista» con su Gobierno integrado por peronistas migrados de Cambiemos, lavagnistas, algún radical enojado y partidos provinciales controlados por gobernadores como Juan Schiaretti (Córdoba), Oscar Herrera Ahuad (Misiones) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
Así, habría un control de la Cámara Baja para aprobar un conjunto de leyes “de estabilización que Fernández planea para su primer mes de gestión”, anticipada por su economista Guillermo Nielsen en una entrevista con el diario brasileño Valor.
En el PRO cuentan a 11 diputados que pueden migrar a un bloque dialoguista y tras las primarias Monzó habló con Alberto y Sergio Massa y empezó a sondear si sus diputados estaban dispuestos a volver a un espacio peronista si pierde Macri en octubre. Metódico, delegó en sus legisladores provinciales la tarea de cuestionar a Jaime Durán Barba por su estrategia electoral y luego se sumó Nicolás Massot, con posteos desde Universidad de Yale.
Dos fuentes del bloque PRO con llegada a la Rosada aseguraron a LPO que el presidente de la Cámara podría conseguir que migren 11 miembros de esa bancada en diciembre, entre ellos a García de Luca, Juan Aicega, Alberto Assef y varios peronistas que llegarán en las listas de Juntos por el Cambio.
Los más activos en el armado de este bloque, por ahora en ciernes, son los lavagnistas, un grupo de hasta 9 diputados, entre ellos el candidato a gobernador bonaerense Eduardo Bucca, sus coterráneos Alejandro «Topo» Rodríguez, y Graciela Camaño; Marco Lavagna, los socialistas santafesinos Luis Contigiani y Enrique Estévez, el mendocino José Luis Ramón y los salteños Andrés Zottos y Pablo Kosiner.
Kosiner fue el jefe de Argentina Federal en estos dos años y es el diputado de confianza de Juan Manuel Urtubey, quien hasta hace una década era el gobernador de mejor relación con Alberto Fernández
Entre los lavagnistas no descartan retener a diputados leales a gobernadores que apoyan al Frente de Todos, pero tal vez no quieran compartir el día a día con el kirchnerismo. «Muchos diputados ya nos dicen que quieren mantener un bloque federal, porque les sirve para negociar. Pero hay que ver si se dan las condiciones», se comentó.
Fernández imagina en el interbloque dialoguista a los 4 o 5 diputados que respondan a Schiaretti, quien lo recibiría la próxima semana en Córdoba; los 3 misioneros y los 7 de Santiago del Estero, cuyo gobernador Gerardo Zamora ya es casi parte de su equipo de campaña. Siempre le gustó sostener una bancada propia, pero mientras que en tiempos de Cristina se sumaba a la mayoría automática, con Macri prefirió negociar ley por ley. No se consideró retribuido cada vez que colaboró.
En sus charlas con colegas, Monzó confesó que también tiene en la mira a radicales molestos con Macri y no dispuestos a compartir un espacio político con sus súbditos si pierde la presidencial. Mantiene buena relación con Martín Lousteau, que se mudará al Senado, pero dejará varios diputados cercanos; y sigue con atención el futuro de Alfredo Cornejo, gobernador de Mendoza, con chances de retener su provincia el 29 de septiembre, a través del intendente Rodolfo Suárez.