Gremios en alerta por (des) atención en el IPROSS
(ADN).- La sede del IPROSS en Viedma está colapsada. Hace semanas -y empeoró desde el lunes- que hacer un trámite para autorizar estudios, comprar bonos de consulta o gestionar un reintegro es una odisea. Por eso, los gremios que integran las vocalías de la obra social se reunirán en los próximos días para exigir una mejor atención a los afiliados.
Uno de los principales inconvenientes es la entrada en vigencia del nuevo sistema de compra de medicamentos que requiere de un reempadronamiento. Para aliviar la sede central, el IPROSS habilitó la sucursal de la calle Urquiza, que también colapsó.
Pero más allá del trámite que exige la obra social para la utilización del servicio de farmacias, hay un problema central: se trabaja manual y artesanalmente en la atención al público. A pesar de las reiteradas promesas, la informatización nunca llegó.
El primer anuncio sobre la implementación inmediata del programa informático lo hizo ex presidente del organismo, Alcides Pinaso, junto al vice Sergio Wisky (hoy diputado nacional), en mayo de 2009. Las autoridades de entonces -como las que los sucedieron y las actuales- delegaron en la empresa estatal ALTEC el desarrollo digital.
Pero nada ocurrió.
Ahora, los integrantes de los gremios estatales buscan que haya una mejor atención al afiliado y alternativas al empadronamiento para evitar embotellamientos en las sedes del IPROSS.