«Sin el Castello en la UOCRA el 90% estaría desocupado»
(ADN). – “Si no hubiera existido esta inversión del Plan Castello, hoy los trabajadores de la construcción estaríamos superando el 90% de desocupación en el sector». De esta manera, el titular de la UOCRA de Viedma, Damián Miler, ponderó el plan de obras provincial y respondió a las críticas que surgieron desde algunos legisladores del Frente de Todos.
Ayer se había manifestado en el mismo sentido el intendente de Campo Grande y ex legislador del PJ, Ariel Rivero.
Miler destacó que en Río Negro «existen 20 mil familias que viven de esta actividad laboral en las obras”, por lo que avaló el canje de bono en dólares que hizo la Provincia con destino a la inversión en obra pública, y dijo que «la UOCRA continúa con el respaldo realizado desde el minuto cero en la Legislatura de Río Negro, cuando se inició el tratamiento de la Ley del denominado Plan Castello».
“Para nosotros, los trabajadores constructores, esta acción instrumentada por el Gobierno de la provincia fue la única viable, en un momento nacional donde se requerían créditos para poder desarrollar las actividades económicas y dotarlas de infraestructura para mejorar la calidad de vida de los pueblos”, indicó Miler.
El secretario general destacó que “este programa contempla obras de energía, de saneamiento, y de agua potable. Pero no sólo eso, sino también puestos de trabajo, tan importantes hoy, en un contexto en el que el empleo de la construcción se ha visto afectado muy considerablemente por la falta de inversión en obra pública a nivel nacional desde el año 2014 a la fecha”.
Por estos motivos, desde la UOCRA Seccional Viedma “rechazamos y repudiamos rotundamente cualquier intento de desacreditar la fuente laboral y lo que significa una obra pública en beneficio de los rionegrinos”, subrayó.
“Como dirigente gremial es mi deber rechazar las expresiones que indican que durante el tratamiento de la Ley para la ejecución del Plan Castello hubo persecución y cárcel a dirigentes sindicales que defendieron la cultura del trabajo. Y por esto llamó a la reflexión a quien o quienes, en su férrea postura de oposición, han vertido estas expresiones a fines de justificar sus acciones”, puntualizó Miler.
Además, consideró que “el acceso a un trabajo digno debe ser un derecho para todos, y nuestros representantes no solamente deben defender el empleo en el sector público, sino también en el privado, y debemos analizar y utilizar las estrategias que más les convengan a los trabajadores, de acuerdo al momento y contexto económico y social que se transcurra. Hoy es necesaria una actitud de unidad de todos para reactivar la economía y el desarrollo productivo tanto a nivel local, como regional y nacional. Si tomamos la responsabilidad política de representar al pueblo, debería ser para solucionar los problemas que otros nos hayan dejado, no para seguir profundizándolos”.
“Es tiempo de buscar un equilibrio entre la deuda y la no afectación de los derechos de todos los trabajadores. Necesitamos refinanciar nuestros pasivos para generar mayor actividad económica y empleo privado”, concluyó el líder sindical.