Ajedrez electoral. ADN
Comienzan a posicionarse nombres y sectores en los partidos rionegrinos en donde el análisis electoral se juega con la precisión del ajedrez, con 16 piezas a mover en 64 casilleros.
El 12 de septiembre se vota en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias y el 14 de noviembre serán las elecciones nacionales para elegir diputados nacionales, donde Río Negro disputa los escaños de Lorena Matzen y de Ayelén Sposito.
Este es un juego con pocos datos de superficie pero muchos ocultos. Intereses sectoriales y pujas de poder que configuran un escenario donde casi con seguridad el protagonismo será de quienes gobiernan, tanto a nivel nacional como provincial e incluso los intendentes. Los responsables de los Ejecutivos no querrán deterioros por internas y en esto no se descarta que algunos nombres salgan desde las funciones de Gobierno.
Las expectativas están puestas en JSRN y el FdT, pensando que los resultados electorales de noviembre pueden configurar una antesala para el 2023, con el posicionamiento de Arabela Carreras por un lado y Martín Doñate por otro.
En Juntos –como no podría ser de otra manera- comenzaron a trascender los nombres. Bruno Pogliano se anotó primero, por una necesidad primaria de posicionarse para el 2023, ya que no tendrá reelección como intendente de El Bolsón, lo mismo que Gustavo Gennuso en Bariloche, o sea que la única salida es por arriba: el parlamento provincial o el Congreso de la Nación, para esto hay una red de contención de los intendentes oficialistas para su “propia tropa”.
Hay otros candidatos. Mercedes Ibero, secretaria de Políticas Públicas del ministerio de Salud. Cuenta con méritos y el apoyo de Arabela Carreras, más aún por su condición de funcionaria en un área que le puso el pecho al Covid.
Si en noviembre el porcentajes de vacunados en la provincia es alto, bajan los contagios y la letalidad, el reconocimiento estará en las urnas, igual situación para el gobierno nacional. La gobernadora también tiene “in pectore” el nombre del legislador (JSRN) barilochense, Juan Pablo Muena.
Otro nombre es el de Agustín Domingo, mencionado incluso por el Gustavo Gennuso y estrecho colaborar del senador Alberto Weretilneck.
Podría haber definición en Ibero y Domingo, mencionado además para jugar en el 2023 la candidatura de intendente en Bariloche. Falta que pase más agua bajo los puentes, pero es una primera aproximación.
Es un juego de poder interno en Juntos, que no está exento de estas pujas por predominios y posicionamientos.
Se alejan las posibilidades de nominar candidatos y candidatas de otros poderes del Estado, como la Legislatura, aun cuando siempre se mencionó a Mónica Silva, ex ministra de Educación y actual legislatura.
¿Qué pasa en el Frente de Todos? Según confió una fuente a esta Agencia, la situación de Juntos “nos saca del escenario de las especulaciones” a la vez que confirmó que “en el horizonte no hay charlas para resolver el tema de candidaturas”.
Hay tres posibles candidatos: Ana Marks, de Bariloche y colaboradora del senador Martín Doñate, y que reforzaría a ese sector; Ayelén Sposito, del Movimiento Evita y José Luis Berros, que responde a General Roca y al sorismo, nominación que resultaría difícil en tanto que la lista de diputados nacionales del 2019 también fue encabezada por un roquense: Martín Soria y no es factible de repetirse.
De todos modos hay tranquilidad en el FdT en que habrá un acuerdo y que la sangre no llegará el río, seguramente a partir de un ordenamiento nacional.
En Juntos por el Cambio hay movimientos, incluso con expectativas mayores a las que se conocen. Hay candidatos como Aníbal Tortoriello, que responde a Juan Martín, pero también está Nicolás Suárez Colman, con apoyo de Sergio Wisky y dirigentes nacionales del macrismo.
La CCARI desea que sus socios se pongan de acuerdo y pugna por el consenso en las listas, un tema hoy lejano. Tortoriello y Javier Acevedo se juntaron ayer en Cipolletti para confirmar la pertenencia a JxC, pero nada hace prever que se pueda salvar la instancia de las PASO. Incluso el Jefe de CABA, Horacio Rodríguez Larreta alentó primarias con la mayor cantidad de candidatos.
Mientras tanto todos esperan al radicalismo. Será una espera en vano, porque la situación interna de la UCR es de fragilidad de cristal. El sector que responde a Lorena Matzen y Santiago Ibarrolaza, no dudan en seguir con el macrismo, pero el otro que llevó a la presidencia del Comité Central a Yamil Direne, fallecido por Covid, espera un protagonismo más provincial y para ello teje acuerdos y cercanías con Juntos.
A su vez, el radicalismo ha dicho en repetidas oportunidades que el candidato de JxC tiene que ser radical. No cumplir este deseo aproxima a JxC a una ruptura, que lo acerca al 5% de los votos del 2019.
La imagen de Mauricio Macri en Río Negro no da esperanzas de ningún tipo, incluso en JSRN piensan en captar votos del PRO, ante un escenario posible en noviembre con bastante control de la pandemia y una aceptable inoculación de ciudadanos en Río Negro. Esa eventual situación deja desubicados los discursos antivacunas y otras críticas a las políticas sanitarias oficiales impulsadas por el macrismo. Estos sectores, por su propio antiperonismo, se podrían volcar al oficialismo provincial.
Queda ahora por ver cómo queda el poder territorial, y si bien no son muy significativas las elecciones municipales de este año, a partir de sus propios padrones. No serán inocuas. El radicalismo y Juntos esbozan acciones en conjunto para fortalecerse en el territorio. Habría acuerdos, por ejemplo, para que en Ñorquinco, municipio gobernado por el radicalismo, JSRN no presente candidato. En Sierra Colorada, unirse para enfrentar a Fabián Pilquinao, lo mismo que en Sierra Grande contra Renzo Tamburrini ; en Pomona el PJ va sólo y el intendente Miguel Ángel Jara tiene buen diálogo con el Ejecutivo provincial.
Un escenario para estar atento y que podría deparar algunas que otras sorpresas.