Tiempos políticos. ADN
Termina el 2021 con movimientos políticos que vaticinan un 2022 movido. Será un año con dificultades y duro en lo económico, donde las provincias sufrirán consecuencias ante un presupuesto nacional sometido al juego político de la oposición. Es grave dejar a un gobierno sin asignación de recursos.
La administración Carreras cuenta con sus previsiones para el año próximo en ingresos, gastos e inversiones aprobadas el viernes en la Legislatura, con la paradoja de un escenario inverso al nacional. Acá el FdT rechazó el presupuesto en semejanza con el voto de JxC, libertarios y sectores de izquierda que dejaron al país sin cuentas en el medio de las negociaciones con el FMI.
Juntos tuvo mayoría y la queja del frente peronista fue la discriminación y falta de recursos en los municipios del FdT. Ese argumento quedó vapuleado por la propia realidad nacional. Alberto Fernández y Martín Guzmán ahora tienen que asumir la responsabilidad de conducir la economía acorralados por la oposición. Las horas en que transcurría la sesión del viernes, en el parlamento rionegrino y con el marco del debate nacional del Congreso, exigía de la bancada que conduce Maru Martínez, un gesto distinto, como haber acompañado el voto en general, con rechazos en particular. Todo fue paradójico en la Legislatura, como el voto de Juan Martín de JxC, en contrario a lo que sucedió con esa fuerza política en Diputados. Los legisladores que responden a Sergio Massa, acompañaron en línea con lo que le pedía a la oposición el presidente de la Cámara de Diputados. Por su parte, no tuvieron dudas los diputados nacionales de JSRN, Luis Di Giacomo y Agustín Domingo: Río Negro necesitaba del presupuesto nacional con promesa de obras. Hubo coherencia.
Así se llega a fin de año. La política se moviliza y siempre da sorpresas. El intendente de Campo Grande, lanzó la creación de un nuevo partido provincial “Primero Río Negro”, bajo los preceptos de Orden y Trabajo y en estos postulados se referenció con Miguel Pichetto. Dejó en claro que el nuevo espacio podrá presentar candidatos propios para el 2023 o participar en alianza con otros partidos. Recibió adhesiones, se reunió con Luis Albrieu, Nicolás Rochas y Alejo Ramos Mejía, que destacaron coincidencias en el proyecto del jefe comunal de Campo Grande. Se hizo trascender, además, que habría adhesiones de intendentes y dirigentes del PJ.
Primero Río Negro será un espacio provincialista como Juntos Somos Río Negro, y si de la defensa de los intereses rionegrinos se trata, no es difícil pronosticar que podría haber una alianza electoral a futuro. Sin embargo, sería más dificultoso un acuerdo de este tipo con el justicialismo ya que Rivero dejó en claro que la dirigencia del PJ no lo representa porque es kirchneristas y “yo soy peronista”, indicó.
¿Sería posible una alianza con JxC, dado la pertenencia de Pichetto con este sector? En política todo es posible, pero la matriz de las eventuales adhesiones que lograría Rivero, no serían del palo “neoliberal”.
A su vez, pareciera que habría orden interno en el peronismo. Siete intendentes del PJ -de un total de nueve- dieron un fuerte respaldo al senador Martín Doñate, quien fue sindicado por sectores internos como el mayor responsable de la derrota electoral de octubre. No acompañaron este respaldo, María Emilia Soria, de Roca y Renzo Tamburrini, de Sierra Grande, en una muestra evidente que el sorismo se despega de la derrota y asigna culpable.
Este apoyo es importante, sobre todo viniendo de jefes comunales, que fueron signatarios de los apoyos nacionales logrados por el senador. En todas las localidades se hicieron obras, se entregaron aportes y se gestionó ante la administración de Alberto Fernández. No alcanzó, no hubo reconocimiento de la población. Ahora vendrá otra etapa. Llamó la atención que el bloque del FdT no brindó este respaldo a Doñate, donde también los circuitos de los legisladores fueron favorecidos.
El peronismo provincial se ordena, iría a elecciones internas. Único camino de salvación y “a contar los porotos”. Cada dirigente y sector deberá demostrar su poder para conducir el PJ y presentar candidatos con respaldo de votos. El año próximo deben estar las candidaturas para competir en el 2023 y el PJ, con el FdT, tiene la responsabilidad de retomar su protagonismo histórico, hoy relegado a un tercer lugar por JxC.
El radicalismo rionegrino también está movedizo. Los radicales, que ahora tienen como representantes en la nueva conducción nacional a Lorena Matzen y Ariel Bernatene, claros opositores al titular del PRO, Aníbal Tortoriello, se están juntando con motivos de fin de año. El martes tendrá lugar la clásica cena en General Roca.
Este sector de la UCR propone llevar candidatos propios en una docena de localidades y apoyar la reelección en tres municipios gobernados por el radicalismo. Se trata de referentes con peso propio en cada lugar y con posibilidades de éxitos electorales.
Estos candidatos se presentarían a las elecciones locales por fuera de Juntos por el Cambio y en alianza con Juntos Somos Río Negro. Esta conjunción se viene dando y se demostró en las últimas elecciones con el triunfo del oficialismo en localidades con referencias con este sector de la UCR. Todo suma y son encuadramientos con peso, como Valcheta, Chimpay, Ñorquinco, Roca, Huergo, El Bolsón y Jacobacci, entre otros lugares, donde además el PRO no tiene referentes ni anclaje.
Este panorama de fin de año podría definirse como de tranquilidad para Juntos, que suma aliados a diestra y siniestra, con un peronismo que tiende a la recuperación, pero desarticulado y falto de sintonía interna, donde la situación del gobierno nacional no ayuda. Ayer, el oficialismo congregó su Asamblea en Luis Beltrán, donde definió que la renovación de autoridades será en marzo. Habrá lista única encabezad por Alberto Weretilneck.
Finalizada la reunión, los dirigentes se trasladaron a una chacra para compartir un almuerzo. Allí fueron Weretilneck y la gobernadora Arabela Carreras las únicos oradores. Clima de festejo ante un 2021 triunfal luego de las victorias en la PASO y las generales. Ahora, comienza la etapa con miras al 2023.
JxC ve que cada jugada política de los sectores que se acercan al calor de JSRN lo deja distante de su anhelo de llegar a la Casa de Gobierno, en Viedma. Después de su segundo lugar obtenido en octubre, este espacio mantuvo silencio, hay quietud y enfrenta el desafío de romper el techo del porcentaje de votos obtenido. Preocupa que todo lo que “anda suelto” lo atrapa Juntos y que además una posible recuperación del peronismo lo desplazaría de las futuras expectativas electorales del 2023.