El Congreso del PJ flojito de papeles
(ADN). – La Justicia recordó al PJ, en una comunicación, que en septiembre vencen los mandatos de los congresales y si bien no se trata de una intimación -en tanto no fija plazos- y además indica que una vez resuelta la fecha de convocatoria al Congreso tendrá cinco días para informar.
Nadie en el peronismo rionegrino desconocía esta situación irregular, en tanto que desde octubre del 2019 Martín Soria, presidente del Congreso, nunca convocó a reunión del máximo órgano de conducción partidaria (salvando las restricciones de pandemia) cuando por carta orgánica debe congregarse una vez año. Paradójicamente este incordio administrativo judicial se resuelve en el ámbito de influencia del Ministerio de Justicia de la Nación, que preside precisamente Martín Soria.
Tampoco las autoridades del Congreso resolvieron la composición de la mesa de conducción que inicialmente integraban, además de Martín Soria, María Emilia Soria, María Eugenia Martini, Daniel Belloso, Alejandra Mas, Silvia Horne, Néstor Ayuelef, María Maldonado, Nicolás Rochas y Luis Albrieu, pero estos últimos cuatro congresales ya no participan más del PJ.
De esta manera ahora el Consejo del Partido debe hacerse cargo ante la Justicia de esta anormalidad de sopor del Congreso Justicialista, donde además hay otros temas a superar a requerimiento de la Justicia, que pidió al justicialismo que respete el criterio de paridad de género, que se vio alterado por renuncias y corrimientos, un tema no menor en proceder a los reemplazos en el marco de la interna entre soristas y doñatistas. ¿Quién decide quién sube y quién baja?
Otro tema flojito de papeles está referido a la integración de la Junta Electoral del Congreso, que desde la renuncia de Nicolás Rochas no fue debidamente conformada. Para resolver la cuestión se había llegado un acuerdo entre los dos sectores internos para que presida este ámbito el abogado Pablo Díaz, pero luego en una reunión on line de la mesa del Congreso, el sorismo impuso a Leo Cerutti, disposición que originó la renuncia de la Junta Electoral, Elizabet Huinca.
Con estos problemas en la mano ahora se analiza desde la conducción del peronismo hallar una solución y respuesta a la Justicia. Se afirma que hay que buscar una salida a un Congreso paralizado donde además el tiempo a septiembre, fecha de caducidad de los mandatos es limitado.