Un triunvirato asumió la conducción en la UCR
(ADN). – La Convención de la UCR provincial suspendió hoy preventivamente, por 90 días, a la presidenta Ángeles Dalceggio y al vicepresidente Walter Carrasco, y ante la acefalía en que quedó el partido se nombró a un triunvirato para conducir el espacio, que está integrado por José Luis Garcia Pinasco, Agustina Madariaga, Francisco Grill. El órgano partidario que se reunió en Chimpay, también manifestó su repudio al atentado perpetrado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
La Convención trató los informes y sumarios que produjo el Tribunal de Conducta, que analizó los procedimientos contables y administrativos de la conducción, que resultaron evidencias para suspender a los dos dirigentes máximos del radicalismo, al tiempo que se juzgó las conductas de ambos dirigentes en actuar en nombre de la UCR dentro de Juntos por el Cambio, contrariando lo dispuesto por la Convención del 19 de marzo, reunida en Choele Choel.
En cuanto a las políticas de alianzas del radicalismo y el análisis del mecanismo para la elección de candidatos del Partido, fueron temas que se dejaron para la próxima Convención a reunirse antes de fin de año.
Documento de la UCR
Al finalizar la Convención de la UCR se dio a conocer el siguiente documento:
Las y los radicales rionegrinos y rionegrinas, provenientes de todos los rincones de la provincia, más allá de las pertenencias internas, nos reunimos en esta Convención Provincial a fin de ratificar nuestro compromiso con la vigencia de la Unión Cívica Radical y sus principios fundadores: libertad, progreso, pluralismo en democracia, derechos humanos y República federal.
Lo hacemos desde la convicción que la Unión Cívica Radical rionegrina se encuentra atravesando un momento político y social, que nos desafía frente a un estilo de participación que requiere de un nuevo paradigma, asociado a la recuperación no solo de la militancia desde el llano, sino también a una tarea calificada de análisis y estudio de las problemáticas regionales y locales para crecer en la consideración de los ciudadanos con propuestas superadoras y contenedoras de sus vivencias y cotidianeidad.
Asumimos el compromiso en la comprensión de estos desafíos, en la convicción que la Unión Cívica Radical es el vehículo para transitar ese camino más cargado de ideas que de la tradicional pelea por el acceso a los cargos del poder y con la mirada puesta en las necesidades aún insatisfechas de rionegrinos y rionegrinas que requieren de quien los interprete adecuadamente.
Trabajamos y lo seguiremos haciendo en la idea que es indispensable superar esa imagen que se proyecta hacia la sociedad de un radicalismo agotado, sin ideas, incapaz de superar su discusión interna, preso de ambiciones personales. Contamos para ello con la fuerte militancia y compromiso de nuestros y nuestras militantes en cada rincón de la provincia ya sea desde alguna representación política o en los espacios orgánicos partidarios o desde su lugar de trabajo, que se fortalecen en sus convicciones frente a la escasez de propuestas alternativas políticas superadoras.
Entendemos que la política en democracia alimenta diferencias, existencia de adversarios políticos, capacidad de construir desde la oposición alternativas pro-positivas y una construcción de ideas que forjen una alternativa superadora y renovadora a la del poder coyuntural.
Es indispensable superar la lógica amigo enemigo, que ha generado una profunda división en la sociedad. Creemos en el diálogo, en la concertación y los acuerdos a largo plazo y para ello exigimos apertura para la escucha, las definiciones internas y la legitimidad que emana de la representatividad en la discusión política, de aquellos partidos que estén dispuestos a dialogar con la UCR rionegrina.
No hay convivencia en paz y en democracia posible, si no somos capaces de afirmarnos en la fortaleza diaria de una conducta de respeto mutuo en el disenso, lealtad a nuestros ideales, y honestidad para con los valores más nobles del ser humano democrático como tal.
Estamos convencidos de que la política es la herramienta que nos permite transformar la realidad y valorar la cosa pública.
Ahora bien, no hay democracia sin desarrollo e inclusión social. En este sentido, nos encontramos frente a un Gobierno nacional agotado en su incapacidad y un Gobierno provincial que requiere cambios de rumbo.
Queremos que nuestra gente viva mejor, que cada uno se sienta parte del cambio necesario. Queremos que la producción y el trabajo para todos, sean objetivos compartidos y reconocidos en la Agenda Pública.
Entendemos necesaria una definición de nuestro partido en términos de Política Pública en la Provincia de Río Negro, porque la sociedad nos exige e intima en ese sentido. Por ello afirmamos como lineamientos generales en el marco de un trabajo de construcción de un Programa de Políticas Públicas para Río Negro, que:
.Río Negro debe poner énfasis en la construcción de una mirada regional, ciudad por ciudad, pueblo por pueblo virando de la política de la dádiva constante, hacia la de las políticas públicas que confluyan en un programa de gobierno.
.Debemos restablecer el pensamiento federal fronteras adentro de la provincia, en términos de vinculación de las ciudades en tanto unidades productivas, para definir los perfiles de desarrollo productivo y social en una planificación de las realidades regionales que permita un abordaje complementario y subsidiario entre las mismas.
.Creemos en un Estado competente en la producción de bienes públicos que intervenga para aumentar la riqueza presente y futura de los rionegrinos, y que permita que la prosperidad llegue a todos con equidad y justicia.
.No hay mas margen para no enfrentar los problemas de una sociedad en el país y en nuestra provincia, fracturada por una desigualdad creciente donde la niñez y la juventud son quienes más sufren la pobreza en niveles inaceptables, la indigencia, la falta de servicios básicos, de acceso a bienes públicos como la educación y la salud públicas de calidad, y el trabajo digno
.Nos interpela la realidad en la búsqueda de asumir definitivamente que la Democracia es vigencia de la libertad y los derechos, pero también existencia de igualdad de oportunidades y distribución equitativa de la riqueza, los beneficios y las cargas sociales. Hoy, nos falta equidad e igualdad en el acceso a nuestros derechos, por eso tenemos una democracia real, tangible, pero aún incompleta.
El Estado debe igualar oportunidades y para ello creemos en el enorme potencial igualador de la Educación.
.La violencia, la inseguridad, el narcotráfico y la trata de personas son flagelos que degradan nuestra sociedad, y exigen un Estado profesionalizado, eficaz y transparente para enfrentarlos.
El retorno y fortalecimiento permanente de la democracia, en tiempos de voces mesiánicas de supuesta salvación, interpela nuestra concepción de República, la defensa que ejercemos de ella y el trabajo y compromiso honesto que le imponemos. Es imprescindible pensar en un camino común en favor de una sociedad más justa. Una sociedad que dé expectativas de vida, movimiento social, crecimiento y salud institucional a nuestros habitantes, capaz de adaptarse a los tiempos que corren mostrando fortaleza en sus cimientos y trabajo para su construcción.
Compartimos y hacemos propias las palabras del Documento de cierre de la Convención Nacional de la UCR en su última reunión:
Las y los radicales de todo el país tenemos que trabajar sin descanso para los nuevos desafíos: que poner a la Argentina de pie no sea un slogan de ocasión, terminar con este tobogán de decadencia que impone el actual período político, modernizar la economía, volver a traer la esperanza que necesitan los argentinos. En esta misión convocamos, en unidad y fraternidad, a todos los argentinos sin importar orígenes y banderías.