Rechazo del bloque de UC al trasvase de agua del río Negro
(ADN). – El Bloque de legisladores de Unidad Ciudadana (UC) expresó su rechazo a cualquier pretensión de uso abusivo del caudal del río Negro, que pretenda llevar adelante o reclamar la provincia de Buenos Aires.
Daniel Belloso, Alejandra Mas y Gabriela Abraham (UC) presentaron un Proyecto de Declaración fijando su posición contraria al trasvase y solicitaron la aprobación de toda la Legislatura en la próxima sesión. En esta iniciativa fueron acompañados por Nicolás Rochás, Luis Albrieu, Facundo Montecino Odarda y Alejandro Ramos Mexia (FR); y el legislador Ramón Chiocconi.
En los fundamentos del proyecto destacan que ante las recientes declaraciones difundidas, luego de la reunión que mantuvo el Gobernador de Buenos Aires, Axel Kicilof, con su ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez; el jefe de Asesores, Carlos Bianco; y los intendentes de Villarino, Carlos Bevilacqua; de Patagones, José Luis Zara y de Coronel Rosales, Mariano Uset, “nos vemos obligados y obligadas nuevamente a sentar postura sobre la protección de los intereses de todos y todas las rionegrinas sobre nuestros recursos naturales”.
En la oportunidad, las autoridades bonaerenses manifestaron su interés en abordar estrategias para mejorar el acceso al agua potable y capacidad de riego de la zona sur de la provincia y en avanzar con gestiones ante la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas de los ríos Limay, Neuquén y Negro (AIC), para disponer de un cupo considerablemente mayor de agua del río Negro (que significaría un trasvase de 150 a 200 metros cúbicos por segundo).
“Esto comprometería la cuenca hidrográfica del Río Negro, que comprende tres provincias: Neuquén, Río Negro y Buenos Aires. En razón de ello es que Buenos Aires no puede arrogarse el derecho de disponer sobre la cuenca rionegrina, menos aún, pretender la realización del trasvasamiento de sus aguas a las del río Colorado”, expresa el proyecto de rechazo de los parlamentarios rionegrinos.
Existen normas de plena vigencia que sientan la postura rionegrina respecto al traspaso de sus aguas, oponiéndose a ello de forma expresa, en procura de la protección de los intereses de la Provincia, “ya que el agua del río Negro se necesita para el desarrollo humano, el riego de los valles, el resguardo del caudal ecológico y el desarrollo productivo, atentando cualquier proyecto de traspaso de sus aguas a otra cuenca, contra los intereses de todos los habitantes rionegrinos y los de las generaciones futuras”.
A estos motivos mencionados que fijan postura contraria al pretendido trasvasamiento, se suma la falta de proyectos sobre la viabilidad técnica que determine la traza del canal, saber qué tierras regará y con qué estudios ambientales se cuenta, considerando las consecuencias del cambio climático que derivó en años de sequía para la provincia.
El promedio de caudal de los últimos años es de entre 300 y 400 metros cúbicos por segundo, en el aforo de Allen, y luego en su recorrido hacia al mar el río alimenta los sistemas de riego de Valle Azul, Valle Medio Chimpay margen norte, Valle Medio Isla de Choele Choel, más otros que se realizan por bombeo, para posteriormente nutrir el sistema de riego de General Conesa y de la zona del Instituto de Desarrollo del Valle Inferior (IDEVI).
“De concretarse el trasvasamiento de 200 metros cúbicos por segundo que pretende Buenos Aires, las consecuencias serían sumamente perjudiciales para Río Negro, ya que se vería afectado el caudal ecológico sustentable en la zona del Valle Inferior, corriendo el riesgo de convertirse en un río semi muerto, afectando principalmente el desarrollo humano y dejando de garantizar el respeto al medio ambiente y a la salud de los habitantes rionegrinos”, remarca la iniciativa.
Finalmente menciona que este desvío de agua dejaría anuladas las posibilidades de ampliar las zonas bajo riego de desarrollo turístico sustentable y de producción e industrialización minera, es decir, se cercenaría la posibilidad de nuevos proyectos económicos para nuestra provincia.