Se eliminó Ganancias con régimen para la Patagonia
El Senado aprobó la eliminación de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias que alcanzaba a los sueldos de más de 700 mil pesos. La votación arrojó 38 afirmativos y 27 en contra, y fue celebrada por el oficialismo en el recinto, donde los palcos estaban repletos. Para los empleados en relación de dependencia, jubilados y pensionados que vivan en las provincias de La Pampa, Río Negro, Chubut, Neuquén, Santa Cruz, Tierra del Fuego y el partido bonaerense de Patagones, habrá un tratamiento especial.
El debate se puso en marcha cerca de las 19, luego de que la sesión tratara primero los pliegos de 33 jueces, entre ellos el de Ana María Figueroa, que se votó por separado, y el oficialismo logró aprobar su continuidad tras una votación que finalizó empatada en 35 sufragios a favor y en contra y Claudia Ledesma Abdala desempatara.
La medida de Ganancias, que fue rechazada por JxC, había sido aprobada la semana pasada en Diputados y era impulsada por el ministro de Economía y candidato presidencial, Sergio Massa, en medio de la campaña electoral.
El interbloque del Frente de Todos cuenta con 31 miembros y tuvo la adhesión de los cuatro peronistas disidentes que conforman el bloque Unidad Federal, alineados con el gobernador cordobés, Juan Schiaretti. En Diputados, este bloque votó dividido, ya que Florencio Randazzo rechazó la quita de Ganancias.
Como ya sucedió en Diputados, los senadores de JxC hicieron hincapié en que la iniciativa es «electoralista» y profundizará el desequilibrio de las cuentas públicas.
De ese modo, se pronunció al inicio del debate la senadora de JxC por San Luis Gabriela González Riollo, quien calificó la medida como «electoralista y oportunista» porque «profundiza el déficit fiscal de la Argentina».
El senador oficialista Gerardo Montenegro (Santiago del Estero) anticipó su voto a favor, al destacar que el salario no es ganancia y considerar que «este impuesto es injusto», al tiempo que pidió: «Dejen de tratar de mentiroso a Massa».
«Ya sabemos que el salario no es ganancia, pero de dónde sale la plata. Pido responsabilidad en estos temas. Adonde está el fondo compensatorio para esta medida», se preguntó a su turno el senador de JxC Ignacio Torres (Chubut).
Del mismo interbloque, Martín Lousteau, dijo que Ganancias «se ajustó tres días antes de las PASO y otra vez 34 días después» y lamentó que la iniciativa «no contempla el impacto de la inflación». «Se pierde el 0,83 del PBI, es duplicar el déficit, lo que va a llevar a mayor emisión y más inflación», advirtió el economista.
También como ya pasó la semana pasada en la cámara baja, los referentes de la CGT y las dos CTA estuvieron este jueves en el Senado para seguir la sesión y celebrar cuando la medida sea votada afirmativamente.
El proyecto de ley de reforma del Impuesto a las Ganancias apunta a que los cambios puedan implementarse a partir del 2024 y, entre otras cuestiones, busca la eliminación de la cuarta categoría del gravamen y la creación, en reemplazo, de un impuesto cedular que fija el pago del tributo únicamente para los ingresos superiores a 15 salarios mínimos mensuales, que hoy representan más de $1.770.000, pero llegaría a $2.000.000 con el ajuste que se debatirá la semana próxima en la reunión del Consejo del Salario.
Ese nuevo gravamen tendrá una alícuota progresiva sobre el excedente, que va de 27% a 35%, y que se actualizará con el valor del salario mínimo dos veces por año. Así, sólo pagarán Ganancias 88.000 contribuyentes, menos del 1% del total de las remuneraciones, jubilaciones y pensiones, de acuerdo con los cálculos oficiales.
El proyecto no incluye a cargos de alta responsabilidad en empresas, como directores de sociedades anónimas, CEOs, gerentes y subgerentes. También se excluyen las pensiones de privilegio y funcionarios políticos.