Evaluación del gran acuerdo: acuerdos y límites
(ADN).- «Falta todavía un camino largo por recorrer. Es un proceso que se debe consolidar». Así, el senador Martín Doñate evaluó el «gran acuerdo», un proceso que comenzó el año pasado en Río Negro en el que convergieron JSRN, la UCR y el PJ-Nos Une. Reiteró que no debe agotarse en un espacio electoral y que no se ciñe a la conquista de cargos en el gobierno provincial, sino que de seba basar en consenso sólidos que den inicio a la provincia del futuro.
En una extensa charla con el diario Río Negro, Doñate también marcó límites y advirtió que no convalidará represión a las protestas sociales que vendrán. Tampoco habrá entendimiento si los representantes nacionales del oficialismo convalidan la Ley Ómnibus.
«No fue, ni debe ser un acuerdo electoral sino coincidir justamente en los grandes temas, como el reciente entendimiento de que el INVAP no es privatizable o que Río Negro es una provincia energética. Ejes para el Río Negro del futuro, si luego se cumple con un gobierno ya son dos mangos aparte», indicó el Senador quien indicó que «ojalá que en el corto plazo podamos sentirnos que ese rionegrinismo si es parte de la representación institucional y partidaria».
¿Qué falta para su materialización en el gobierno de Weretilneck? ¿Diálogo? ¿No hay coincidencia en la metodología?
«Falta mucho más diálogo y se debe construir. Me hago responsable, pero es una responsabilidad conjunta. Nos falta mucha más madurez para encontrarnos en nuestras disidencias. Esta crisis puede ser una oportunidad y ayudar a que eso se acelere. También a uno le da esperanzas cuando ve a un gobernador sentado con legisladores o intendentes de otros partidos para gestionar la cosa pública. Lo importante es que nuestra generación pueda pensar la Provincia del 2050».
En la conjunción del Gran Acuerdo, la UCR si participa de la gestión de Weretilneck. ¿Uds. no están por decisión propia o por qué no fueron convocados?
«El gobernador decide con quiénes quiere gobernar y tiene todo el derecho. Estamos a disposición para colaborar con ideas. Por ejemplo, hace unos días hablé con el gobernador de alternativas para la deuda de 30.000 millones. Pero si él requiere a un compañero o una compañera de nuestro partido para asumir responsabilidad en el gobierno, en el espacio lo vamos a evaluar. No planteamos el acuerdo en función de lugares sino con el aporte de ideas y proyectos».
No queda en claro. ¿Hubo o no hubo ofrecimientos?
«No, si hablamos de cargos ministeriales. Pero, somos muy respetuosos. El gobernador armó su equipo, con gente que trabaja desde hace mucho tiempo con él en algunas temáticas, como en Energía. Y después si algún compañero recibe una propuesta de ocupar un lugar, por supuesto, tiene toda la libertad de hacerlo. Lo mejor que podemos hacer ahora es estar a disposición del gobierno. También daremos nuestra opinión cuando se vaya en contra de lo que creemos se debe hacer. Seremos un buen contrapeso».
Hay situaciones limites en esas evaluaciones?
«Si, hay límites, como cuidar a los estatales de Río Negro. La situación será crítica, pero no hay posibilidades de reprimir los reclamos que seguramente vendrán. No debe existir estigmatización y debe existir mucho diálogo y comprensión».
Además de ese límite para el acompañamiento en estas “coincidencias generales”….
(interrumpe) «Efectivamente, son coincidencias generales… Lo hacemos para sumar a la provincia. Lo repito de que si el gobernador cree que podemos ser útiles, lo evaluaremos. Lo mejor, lo dije en su momento, habría sido institucionalizar el Gran Acuerdo porque hay procesos agotados. El partido de JSRN fue parte de una etapa en la Provincia donde pretendió representar la defensa de los intereses de Río Negro, pero eso quedó caduco. Esa defensa no está representada en un solo partido. La experiencia de Juntos se agota en la figura del gobernador».
Pero, volviendo a los límites. ¿La posición provincial frente al gobierno de Javier Milei puede ser otro?
«Sí, claro. Nada vamos a tener que ver con el oficialismo provincial si, a cambio de algún tipo de recursos, están dispuesto a votar algunos artículos».
En ese contexto Doñate remarcó que “quedó en claro el fracaso” de la postura nacional de JSRN de “pretender arrogarse la representación exclusiva de Río Negro”. “Pero no hay proyecto exitoso de Provincia si no hay un proyecto del país. No existe esa soledad de ser rionegrinos y que se vote a un diputado sin importar qué presidente ganen. JSRN planteó la idea de votar a su candidato diputado, sin importar si votaban a Javier Milei, a Patricia Bullrich, a Horacio Rodríguez Larreta o a Sergio Massa. Y estuvimos a tres puntos de ganar en primera vuelta. Es probable que ahí, en esas estrategias, se nos hayan ido muchos votos. El partido Provincial no pudo poner a su diputado y además, hoy estamos sufriendo las consecuencias de Milei”.
El mensaje es claro: el gran acuerdo debe sostenerse en todos los ámbitos.
Por eso, Doñate reafirmó que frente al DNU y el proyecto de Ley Ómnibus no votará “un punto, ni una sola coma” porque se “claramente inconstitucional y legal, es definitivamente es el desplome absoluto del federalismo de Argentina y por supuesto de la economía de Río Negro”. Dijo que “es un plan de saqueo de los recursos naturales” y “el presidente en la sombra es Mauricio Macri, que hace entrega de negocios a sectores concentrados”.
En su análisis, el parlamentario advirtió que las medidas abren la posibilidad de “quitarle la zona austral a la Patagonia y el cobro del 40% del plus. Es una situación de una gravedad inconmensurable”. Y consideró que las respuestas deben ser “una conjunción de la política” por la actuación del Congreso y de la Justicia que “tendrá que actuar”.
Estas declaraciones fueron realizadas después de las expresiones del diputado nacional Agustín Domingo (JSRN) sobre la posibilidad de acompañar algunos puntos de la propuesta del presidente Javier Milei.
La casta y la tragedia social
El senador subrayó que “hicieron una gran campaña que iban a gobernar contra la casta, pero lo está haciendo con la casta más rancia y quién está sufriendo es el pueblo trabajador. Son familias que hasta noviembre les costaba mucho llegar a fin de mes pero, ahora, no está pudiendo comer. El gobierno no tiene dimensión de los efectos que puede tener en los colchones de pobreza del conurbano y en el interior profundo del país”.
Doñate consideró que “el escenario actual es tremendo y termina con una tragedia social”. Reafirmó que será “opositor sin dejar margen para ninguna negociación a la que nos quiere llevar el gobierno actual en Nación a pretender flexibilizar o entregar nuestro territorio, los recursos naturales, el federalismo, y las autonomías de las provincias”.
Río Negro
En lo rionegrino, Doñate anticipa que la Provincia tendrá “enormes dificultades para cumplir con los servicios”, considerando de que la Nación no compensará la baja de los envíos por coparticipación y la caída de ingresos por la recaudación provincial por una menor actividad económica y, además, la baja del pago de los tributos.
Prevé “un escenario dramático para marzo” y, por eso, reedita su estrategia de “una gran unidad de quienes tenemos responsabilidades institucionales”.