Devaluación: economías regionales afectadas
(ADN).- La Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) puso bajo la lupa la actividad de las economías regionales post-devaluación, la medida que tomó -entre otras- el gobierno nacional para bajar el déficit. El tradicional monitoreo mostró que algunas tendencias aún no se modificaron. La pera y la manzana, en estado de «alerta».
“Tiene una destacada repercusión el cambio en los precios relativos en los costos, con traslación más rápidamente que en los ingresos. Sin embargo aún siguen vigentes los efectos de la sequía 2023 y el mercado no acompaña: exportaciones estancadas y consumo con mucha incertidumbre”, resumieron desde la entidad.
La medición se trata de “una lupa sobre precios y costos”, dado el significativo salto del mes de diciembre, con cambio de Gobierno y devaluación incluida.
«Estas dos variables conforman el primer pilar del semáforo, al que llamamos “Negocio”. Una aclaración previa: los datos se refieren son valores promedio del mes en precios y costos anualizados, es por ello por lo que puede diferir de análisis de fin de diciembre o principios, ya que la devaluación ocurrió a mediados de mes”, comentaron.
De ese modo, las subas de precios al productor ocurrieron por encima de la inflación interanual en 11 de las 19 actividades, con un valor promedio (simple) de +326%, mientras que los 8 restantes, por debajo de la inflación lo hicieron en +163%.
Economías regionales «en verde»
Apenas dos producciones fueron las que contaron con el color verde aliviador: maní y porcinos.
El maní visualiza por estos días una recuperación de las exportaciones, algo que vino a repuntar su actividad en el mes de diciembre luego de haber pasado un 2023 bajo muchos signos de interrogación.
En el caso de los porcinos el visto bueno es bastante más escueto, ya que se dio una suba importante de costos de producción, pero se destaca la estabilidad del mercado, tanto para exportar, importar y el consumo interno.
Siete economías regionales en alerta
Se trata del rango “medio” propuesto por Coninagro. Para esta ocasión engloba al arroz, los bovinos, hortalizas, papa, peras y manzanas, tabaco y yerba mate.
Hay casos muy disímiles, como la “recuperación productiva” del arroz apuntalado desde el negocio, la rotunda caída del mercado de los bovinos a pesar de las buenas condiciones para producir, la constante incertidumbre sobre las hortalizas con la caída de precios en el tomate, la cebolla y la zanahoria, o la esperanza de la pera y manzana, que está en la víspera de finalizar su cosecha.
Yerba mate: hay precios de la hoja verde por debajo de la inflación, aunque se destaca su recuperación productiva.
El mapa «rojo»
Donde sí ponen el foco sobre lo preocupante de la situación es en las economías en crisis o al menos con signos de estar en tal situación. Aves, cítricos dulces, granos, leche, miel, vino y mosto son las que más preocupan, pero algodón, forestal, mandioca y ovinos están en observación.
Las aves tienen un panorama muy complejo, con una suba de costos de gran magnitud y muchas complicaciones a la hora de exportar. Los tres pilares de la medición elaborada por los técnicos Silvina Campos Carlés y Enzo Comelli muestran que “negocio, producción y mercado” están en rojo para la avicultura.
La misma suerte corren los granos, cítricos dulces, leche y vino y mosto. En este nuevo caso se espera una pronta mejoría desde la calidad y la cantidad de producción para la venidera vendimia, pero no se visualiza un panorama de certidumbre en la exportación.