Medicamentos: cayó un 20% las ventas en Río Negro
(ADN).- «No todos los rionegrinos están accediendo a los medicamentos». Contundente, la frase muestra una problemática cada vez mayor en el país y de la que la provincia no es ajena. Por el aumento de los productos, muchos pacientes ya no están siguiendo los tratamientos médicos indicados.
El portavoz fue el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Río Negro, Roberto Zgaib, quien indicó que el precio de los medicamentos se ubica un 30 a 40 por ciento por encima de la inflación, lo que produjo una caída en las ventas que en Río Negro ronda el 20%.
Zgaib aclaró que en los últimos treinta días el aumento de precio acompañó la inflación, pero «el problema se produjo con los aumentos anteriores, desde las PASO hasta diciembre: ahí aumentaron un 30 a 40 por ciento más de la inflación, producto del aumento anterior al ballotage, ahora está siguiendo el ritmo de la inflación».
El dirigente, en diálogo con Radio Seis, manifestó que ha caído la venta de medicamentos lo que indica que «no todos los argentinos están accediendo a los tratamientos». Precisó que se habla de una caída de más del 20 por ciento. Expresó el deseo de que esto se resuelva porque «sino va a ser más crítico».
«Nadie se anima a poner el cascabel al gato, el mercado está manejado por 5 o 6 laboratorios que manejan a discreción la producción y los precios», aseguró.
Reconoció que el tema de los medicamentos es complejo a nivel mundial, el nivel de competitividad es muy limitado porque «se trata de la salud de la gente, los gobiernos normalmente no se meten en eso y saben el dinero que se maneja» y agregó que los laboratorios «consiguen lo que quieren».
Zgaib explicó que «cada vez perdemos más rentabilidad las farmacias en detrimento del sistema». Además informó que bajó la venta de protectores sociales y cosmética, más que los medicamentos, «cerca de un 80 por ciento».
Explicó que hay problemas con medicamentos más nuevos, como ciertas insulinas, dado que hay dificultades de abastecimiento por los altos valores. De este modo en localidades chicas, hay farmacias que no tienen estructura para soportar 60 días el pago de las obras sociales y no adquieren ese tipo de medicamentos.
Reflexionó sobre el sistema y señaló que la situación es muy compleja. Consideró que deberían sentarse todos los actores involucrados en una mesa para resolverlo. Calificó al sistema como una «carnicería» dado que es «un sálvese quien pueda». Consideró que «eliminar totalmente al Estado no es bueno». Agregó que «una cosa es ser liberal y otra ser insensible, tenés que tener un sistema que contenga a la sociedad en lo básico, educación, seguridad, salud y justicia, tiene que funcionar».