Cumbre de la casta. ADN
Casta: grupo social que impone la endogamia. Y la casta tuvo su cumbre en San Carlos de Bariloche. Porque si se trata de pertenencia a un círculo cerrado, el foro empresarial juntó a la flor y nata del poder económico más favorecido por el programa libertario de la Rosada.
Javier Milei les dio la bienvenida, calificó de héroe a quien “fuga dinero” y evade al Estado y les pidió que “pongan las pelotas e inviertan”, todo en un clima de misterio y reserva, a punto tal que, cuando el sofisticado sistema de comunicación contratado para evitar filtraciones detectaba que desde algún celular de los presentes se enviaba un mensaje sobre la intimidad de la reunión, se acercaba un miembro de la seguridad del Llao Llao y pedía que apagara el teléfono. Era fundamental mantener la confidencialidad.
Esto es la casta. Aislados en uno de los hoteles más lujosos de la Patagonia, fuertemente custodiados y lejos de toda bulla populista, que el presidente eludió porque ante el conflicto actuó de manual, “salió por arriba y se trasladó en helicóptero”.
Milei estuvo en tierra hostil. No fue recibido por el gobernador Alberto Weretilneck. La “bienvenida” estuvo a cargo del ministro de Gobierno, Federico Lutz y el intendente Walter Cortés. Entiende de mensajes y con su habitual arma, atacó, por las redes a la Universidad Nacional de Río Negro, ante el “abrazo” del jueves a la sede atlántica. Algo de la provincia había que agredir.
La provincia está fuera del radar libertario. Aún, cuando se trabaja desde el Ministerio del Interior en buscar del apoyo rionegrino a la Ley Bases y que Weretilneck salga en la foto del 25 de Mayo en Córdoba, aunque sea en un costado, para que -ante un divorcio- se pueda cortar, como sucede en los retratos familiares.
Weretilneck sufre el aislamiento y busca, desde su provincialismo, jugar y ser tenido en cuenta. El tema es cómo. Quizás en este esfuerzo se entienda un posteo de ayer, con fotos incluidas, en la red X, donde el gobernador informó que fue invitado “al Encuentro Federal por la Memoria, que se vivirá el 25 de junio”, al recordarse el 30 aniversario del atentado contra la AMIA, con agradecimiento al presidente de la institución, Amos Linetzky, entre otras autoridades israelitas. «Los acompañamos en la lucha para evitar que este crimen, aún impune, quede en el olvido», escribió el gobernador.
Quizás este sea uno de los caminos elegidos para llegar a Javier Milei, y definir un posicionamiento en el conflicto de Medio Oriente, tal como el Presidente colocó al país en ese flanco internacional, aunque pareciera innecesario en una provincia con poca o escasa comunidad judía y con cultura ecuménica entrelas diversas expresiones religiosas.
Finanzas, descubierto y deuda
Aunque no lo diga, y reniegue en público del presidente Milei, el Gobierno busca un canal válido con la Casa Rosada. La única y potente razón es que la situación de las finanzas públicas es desesperante. Un informe reservado del Banco Central de la República Argentina -al que suelen tener acceso políticos y economistas, pero no el público- muestra que Río Negro es la única provincia que tiene más de 36.000 millones de pesos en descubierto, frente a las otras 23 provincias que tienen saldo positivo en la misma fecha.
Si bien los giros en descubierto son una herramienta, la comparación con las demás provincias argentinas genera una más que llamativa diferencia. Ante ese cuadro, desde la Legislatura se estaría preparando una batería de informes y pedidos de interpelación por el estado de deuda que acumula Economía, y el cobro de intereses diarios que pierde la provincia frente al Banco Patagonia. Fuentes de los distintos partidos consultados adelantaron que plantearán la reactivación de la comisión de seguimiento que, curiosamente, fue compuesta sin participación de la oposición.
El capítulo financiero, de deuda, descubierto bancario y su legalidad, intereses de deudas acumulados y los por venir, más los niveles de compromisos de pagos de deuda en dólares y bonos, que se están amontonando en la administración de Weretilneck, serán parte de la agenda en este año legislativo en el que, el objetivo de terminar con el déficit fiscal como propone Javier Milei, tiene a Río Negro como la peor provincia de todas.
Por otro lado, desde la oposición hay contactos desde distintos bloques y legisladores y se estaría preparando, como primer medida, una reunión ampliada a la comisión especial de servicio financieros y bancarios de la Legislatura, para exigirles actividad e información y conocer en detalle todo el estado de situación de la provincia que se ha vuelto una bola de nieve imparable.
Si el oficialismo traba la comisión, se evaluarán otros pasos, medidas y acciones.
A un año del triunfo electoral sin pena ni gloria
Sin pena ni gloria se cumplió el 13 de este mes, el año del triunfo electoral de Juntos Somos Río Negro. Ni el propio gobierno rescató la fecha. Solo tibios posteos en redes de los integrantes de la fórmula. Ese sábado todos se tomaron el feriado. En la semana el jefe de la bancada oficialista, Facundo López, firmó un comunicado alegórico.
Tampoco recordaron la fecha los aliados electorales del año pasado, Nos Une Río Negro y la UCR.
Hubo apatía. Un síntoma que denota un cambio en la composición del poder de aquel domingo del 16 de abril del 2023.
Un ejemplo. La Legislatura no refleja aquel resultado de las urnas. La mayor expresión electoral no está representada oficialmente en el parlamento rionegrino. Ni un interbloque, ni tratamiento de agenda en común.
¿Qué devela este aniversario? Quizás, la defunción del Gran Acuerdo Rionegrino nacido en los despachos del senado de Martín Doñate y de Alberto Weretilneck, y la larga relación del radical Daniel Sartor con su amigo el gobernador.
Aunque algunos lo nieguen, la disolución de este espacio puede generar a futuro un problema para Juntos, aún, cuando muchos se alegren de sacarse “a la Cámpora” de encima, un calificativo que atrasa y que interpela la vigencia del espacio nacido al calor del Estado, por Máximo Kirchner.
En la pelea con el gobierno nacional no sería propicio perder aliados, al contrario, parecen tiempos de ampliar acuerdos y consensos con generosidad y amplitud de criterios. Aquel peronismo amigo, que conduce el aparato partidario del PJ, con legisladores e intendentes, lejos de JSRN, ahora trabaja para la unidad del justicialismo.
Juntos está obligado, en un clima de permanente negociaciones salariales, sin recursos y aislado, de observar los síntomas de pérdida de poder que aparecen, en principio como estrellas fugases, pero que pueden terminar iluminando un firmamento opositor.
Legisladores de todos los bloques que representan a General Roca, se juntaron y cuestionaron al gobierno por instalar el resonador, comprado para esa ciudad, en el hospital de Cipolletti. E hicieron un pedido de interpelación a la ministra Ana Senesi. Un hecho político que merece ser analizado, para ver cómo se para la oposición frente al Ejecutivo, aún Javier Acevedo, de la CC-ARI, que “sin pintarse de verde” juega a la gobernabilidad, pero se cansó de pedir que al menos se trate la emergencia sanitaria, reiterada por “los lilitos”. Se cansó.
Tras el pedido se encolumnaron, además de Acevedo; Juan Martín y Claudio Doctorovich del PRO; y José Luis Berros y Diego Delgado Sempé del PJ. Un llamado y la intervención de Sartor quitó de la lista al radical Ariel Bernatene que en principio dio su aprobación para firmar el documento.
La UCR venía de demostrar independencia de Juntos cuando sus intendentes se reunieron con la diputada libertaria Lorena Villaverde. Otro síntoma de emancipación hubiese sido letal.
Facundo López, le echó la culpa “al gobierno anterior” por definir llevar al resonador a Cipolletti, porque en Roca no se hicieron las obras necesarias para instalarlo, y, además, en boca del Adorni rionegrino, se acusó a la oposición de oportunismo y de sacar rédito político del hecho.
Esta situación puede definirse como puntual y fuera de un contexto real opositor, pero sumando todos los legisladores de las bancadas adversarias el contexto político es diferente al que se imaginó Juntos hace un año. La legislatura se puede convertir en un polo opositor.
Todos los gobiernos rionegrinos han tenido su Waterloo y esa batalla hoy está en la salud, donde a todos les significó un problema, a punto tal que el Plan de Salud del gobierno peronista de Mario Franco, en 1973, se presenta como inigualable.
Un terreno adonde el gobierno está solo y criticado, no sólo desde el hospital público sino también desde la obra social, que persiste en un sistema superado para reconocer los descuentos de los medicamentos, con médicos que cobran plus, con los jubilados cada vez más marginados y con sensibles atrasos en los reintegros.
Quedó lejos aquel escenario de abril. Este momento muestra un gobierno encerrado en un núcleo de Juntos. La inspiración de un gobierno de coalición quedó descartada. Hubo señales. Tras el triunfo, Weretilneck y su círculo rojo dedicaron tiempo en la interna con Arabela Carreras. Pero no mejoró después del 10 de diciembre. No se abrió el Gabinete a los socios, ni hubo anuncio de un plan de gobierno novedoso, ni se presentó un proyecto superador a JSRN. Tras cartón, Milei ganó el balotage y todo lo diseñado, programado y soñado quedó hecho añicos.