Detenciones y represión en el Congreso
En las inmediaciones del Congreso hubo un importante despliegue represivo contra los manifestantes que se concentraron frente al Congreso Nacional para rechazar la Ley de Bases que se debate en el Senado. Hay periodistas, manifestantes y diputados heridos y, al menos, 18 detenidos, según informó el Ministerio de Seguridad de la Nación. Ahora hay una tensa calma.
La represión comenzó alrededor de las 13:30. Para esa hora, gremios, organizaciones sociales y políticas congregaron una importante concentración que llenó la plaza de los dos Congresos. Después de una mañana cargada de tensión, las fuerzas de seguridad avanzaron sobre los manifestantes con infantería y gases lacrimógenos. En respuesta, se iniciaron unos incidentes donde personas con sus rostros tapados quemaron autos, bicicletas públicas y destrozaron partes de la zona.
Entonces, las fuerzas federales desplegaron una fuerte represión con balas de gomas, camiones hidrantes, gases lacrimógenos MK- 9, según denunció el CELS. Incluso se vieron efectivos de la Perfectura Naval portando armas de fuego.
En medio de la fuerte represión, senadores de Unión por la Patria pidieron un cuarto intermedio para revisar la situación en la plaza, pero no fue concedido.
Mientras la movilización se llevaba a cabo de manera pacífica, la gendarmería empezó a avanzar sobre los manifestantes en Hipólito Yrigoyen, a la altura de Entre Ríos. Además, colocaron un vallado para que los manifestantes no crucen.
Sumado a eso, los gendarmes comenzaron a mojar a los asistentes con un camión hidránte y a dispararles con gases lacrimógenos y balas de goma. Del lado de los manifestantes, devolvieron la violencia con piedras y bombas molotv.
Manifestantes voltearon y luego prendieron fuego un auto que funciona como móvil de la radio cordobesa Cadena 3. Tras unos minutos, un camión hidrante apagó las llamas del vehículo.
Asimismo, un rato después, voltearon e incendiaron otros dos autos que se encontraban estacionados en las inmediaciones del Congreso.
Según C5N, la situación que se vive allí es «de máxima tensión», con la presencia de más de 50 efectivos de gendarmería y de la Policía Federal. «No vamos a hacer nada, estamos aplaudiendo», dijo una manifestante, mientras que otro aseguró que el operativo «es un desastre».