ATE calificó de «ilegal» no renovar contratos por paros
(ADN). – “La amenaza del gobierno de despedir a los trabajadores contratados que realizan paro es una ilegalidad manifiesta, porque el Ejecutivo está dando por sentado que son despidos por discriminación, lo que está prohibido por ley”, dijo Romeo Aguiar, secretario gremial de ATE, de esta manera respondió el gremio al anuncio de ayer del Ejecutivo de no renovar los contratos que vencen el 31 de diciembre del personal contratado del Estado, que adhiera a las medidas de fuerza anuncidos de esta semana.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) arrancó este miércoles la segunda jornada de paro de 36 horas, que según sus propios relevamientos cuentan con una adhesión cercana al 95% en la administración pública nacional y provincial y en las administraciones municipales. «En los hospitales y la SeNAF sólo se garantizan guardias. En las escuelas el acatamiento es prácticamente total. Se observan oficinas vacías en el Parque Nacional Nahuel Huapi, ANSES, PAMI, SENASA, Vialidad Nacional y Conicet, entre otros organismos», dijo ATE.
“A esta altura las amenazas nos hacen cosquillas: algún ministro dijo por ahí que si parás contra la Provincia, te descuentan; si parás contra la Nación, también. ¿Qué significa eso? ¿El ajuste ya está signado en un escritorio? Pero los estatales le perdimos el miedo y la contundencia de la adhesión lo demuestra”, agregó el sindicalista frente a lo dispuesto por el gobierno provincial para los agentes contratados que hagan paro.
Y Romeo Aguiar apretó el acelerador y afirmó que esta medida oficial «sería una vulneración del derecho constitucional de estabilidad, sin precedentes en democracia por la masividad de personas despedidas en caso de que lo concreten”, y convocó a los estatales «a no incurrir en el temor».
“Nosotros seguimos exigiendo la reapertura paritaria en la provincia. No podemos los estatales pagar el ajuste de la Nación. Reclamamos volver a la política de recuperación de poder adquisitivo que iniciamos en enero”, señaló Aguiar.