Crecieron los envíos de pera a la industria. Falta calidad

Los envíos de peras con destino a la industria totalizaron en el período enero-noviembre del corriente año las 193.472 toneladas, volumen que representa una caída interanual del orden del 9% y una suba del 11% en relación a la media de los últimos cinco años (2019-2023). Así lo destaca un reciente estudio elaborado por el Servicio nacional de Calidad y Sanidad Agroalimentaria (SENASA), en el que se observa que la tendencia de los últimos años ha sido un crecimiento de la cantidad de fruta que no va al mercado en fresco y se orienta a la industria.

Sin embargo, pese a que en lo que va de la presente temporada, menos pera fue orientada a la industria respecto de 2023, hay un claro cambio de tendencias a partir del segundo semestre del año. En toda la primera parte de 2024 los envíos mensuales de pera este año fueron menores a los del año pasado. Pero, a partir de julio, se observa un claro cambio en los números que muestra el SENASA.

Las diferencias crecen en la medida que pasan los meses. En noviembre el total de pera orientada a la industria totalizó las 4.501 toneladas, un volumen que refleja un salto del 164% en términos interanuales y del 181% en relación al promedio de los noviembres de las últimas cinco temporadas (2019-2023).

¿A qué se debe este cambio de tendencia? Fundamentalmente a los problemas que presentó el mercado y la falta de calidad sobre la fruta almacenada. A partir de julio, los empresarios comenzaron a visualizar que los stocks de la especie se encontraban muy altos, por encima de la media de las últimas temporadas. Con esa foto y un mercado interno y externo poco activo, era sencillo prever que la actividad se encontraba frente a una potencial sobreoferta de producto de cara al segundo semestre del año.

Pero a este complejo contexto se le sumo que la fruta almacenada en frío, no tenía la calidad que estaba demandando el mercado en fresco en esos momentos. la única salida para esa peras -que en muchos casos ni siquiera cubrió el costo de producción y frío- fue entregarla a la industria para la elaboración de jugo concentrado. De ahí el progresivo crecimiento que muestran las estadísticas a partir del segundo semestre del año en relación a los envíos de pera a la industria.

Obviamente esta decisión empresarial, tuvo sus consecuencias sobre los retornos que terminaron consolidándose en la pera para la presente temporada. Esta semana algunas empresas salieron a ofrecer las liquidaciones finales a los productores por la pera entregada en enero. Los número, en la mayoría de los casos no sobre pasa el techo de los 0,20 dólares por kilo. Teniendo en cuenta que los costos de producción para este año -según datos oficiales- se ubicaron por encima de los 0,30 dólares por kilos, el productor perdió al menos 0,10 dólares por kilo de pera entregada a las empresas comercializadoras. Este quebranto, sin dudas tendrá efecto muy negativos para la presente cosecha, que en pocas semanas más, dará inicio en toda la región del Valle de Río Negro y Neuquén.

La Mañana de Cipolletti